El Ayuntamiento bilbaíno congeló para este año el impuesto de circulación, el que pagan todos los vehículos matriculados en la ciudad. Pero ello no ha impedido que Bilbao, de media, sea este año la segunda ciudad que más caro cobra este impuesto en España. La primera es San Sebastián, según un estudio elaborado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA).

En la capital vizcaína, se pagan entre 24,04 y 262,10 euros por vehículo al año, en función de su potencia y distribuidos en seis categorías.

Las tarifas máximas en toda España, con excepción de la comunidad autónoma vasca, se sitúan entre los 25,24 los y 224 euros, con lo que los bilbaínos pagan un 17% más que el máximo marcado en el resto de España.

La razón es la autonomía de las diputaciones vascas para establecer unas tarifas máximas diferentes a las que se marcan en el resto del Estado.

Dada esta libertad, los consistorios vascos "ajustan más sus impuestos a los máximos establecidos", explica Mario Arnaldo, presidente de AEA.

Bilbao, en realidad, no es la ciudad más cara en cada una las categorías de marcan la potencia fiscal de los vehículos, pero sí lo es en cuatro de ellas, las que se cobran a los vehículos más potentes del mercado, de más de 12 CVF.

En los coches de nivel medio, Bilbao desciende al noveno puesto de las ciudades más caras. Según el estudio, el propietario de un Renault Megane, con 11 caballos fiscales y el más vendido en España, pagará en Bilbao 65,08 euros, en Madrid, 61 euros y en Melilla 17,04 euros.

Es decir, el impuesto bilbaíno es un 381% más caro que el de Melilla, casi cuatro veces más. Si se hace un promedio de todas las categorías, en Bilbao se pagan 143 euros, 18 más que los 124,62 euros, que como máximo y de media , pueden cobrar el resto de ayuntamientos de España. Con las motos pasa algo similar. En las de 250 CC, Bilbao es la ciudad más cara.

Paraísos fiscales

Son localidades donde los vehículos matriculados superan ampliamente al número de vecinos. El impuesto de circulación es mucho más barato y cada vez hay más pueblos considerados "paraísos fiscales".

Según AEA, en La Cerollera (Teruel) hay 15.119 turismos matriculados y 124 vecinos. En Rajadell (Barcelona) hay más de 24,000 coches y  sólo 470 vecinos.

Las empresas beneficiadas son las de alquiler de coches, ya que se ahorran "millones", explica Mario Arnaldo. AEA ha detectado este año 18 paraísos fiscales. En 2007, eran 10.