El actor Ryan Phillippe trató de convencer durante más de un año a su ex mujer, la también actriz, Reese Witherspoon para que no siguiera a delante con los trámites del divorcio.

A pesar de que la pareja formada por Phillippe y Witherspoon era una de las más consolidadas de Hollywood, el matrimonio puso fin a su relación en 2007 tras siete años juntos.

En el último número de la revista W, el intérprete admite, que aunque no es fácil, ya está asimilando su condición de divorciado y cada día "está menos triste por ello".

No siempre ha sido así ya que a raíz de la separación, el protagonista de Crash sufrió una fuerte depresión que le llevó a plantearse el suicidio.

"Después del divorcio yo estaba físicamente destrozado. Me despertaba llorando y vomitando. Quería morirme y estaba dispuesto a acabar con mi vida", explicaba Phillippe en una entrevista.

Reese Witherspoon y Ryan Phillippe tienen dos hijos en común Ava Elizabeth, de ocho años, Deacon Reese, de cuatro.