Las indagatorias, que se realizan una vez que se ha dictado el auto de procesamiento, son un requisito formal para la adecuación del procedimiento, en este caso de diligencias previas a sumario, y suponen el inicio de una segunda fase de la instrucción, tras lo que se tendrá que dictar un auto de conclusión de sumario.

Estas declaraciones continuarán mañana martes y el jueves de la misma semana con otros ex responsables municipales; aunque hay comparecencias fijadas, según las distintas providencias, al menos hasta el 31 de marzo para otros procesados por su presunta implicación en la trama de corrupción marbellí.

En esas comparecencias, según la Ley de Enjuiciamiento Criminal, se les preguntará a los procesados determinados datos como nombre, estado, profesión, si han sido procesados anteriormente y si conocen el motivo por el que se le ha procesado. Así, las preguntas irán dirigidas a la averiguación de los hechos y a la participación en ellos del procesado y de las demás personas.

La legislación indica que se permitirá al procesado manifestar lo que tenga conveniente para su exculpación o para la explicación de los hechos, aunque también podrán simplemente ratificarse en las declaraciones anteriores.

El anterior instructor del caso 'Malaya', Miguel Angel Torres, inició el sumario al considerar que se daba un delito de blanqueo de capitales de forma continuada por parte de "una organización" formada por los principales imputados, con Juan Antonio Roca como presunto cerebro de la trama, de modo que las condenas de prisión podrían superar los nueve años.

Posteriormente, este mismo magistrado dictó el auto de procesamiento contra 86 personas por su presunta implicación en la trama de corrupción, en el que se detallaban todos los presuntos cobros de Roca de parte de empresarios y los pagos que habría realizado éste a los entonces concejales y responsables municipales.

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