Los alumnos intentaron reventar la reunión, donde finalmente se aprobó el nuevo reglamento disciplinario. Éste permitirá a la UPV expulsar a los estudiantes que saboteen actos oficiales.

Tres jóvenes sufrieron moratones y heridas leves, según el sindicato convocante de las protestas, Ikasle Abertzaleak.

Pasó lo que se esperaba. Las protestas empezaron dentro del claustro, donde ocho representantes del alumnado tienen derecho a estar. Éstos interrumpieron el acto con gritos, carteles... Aprovechando que los vigilantes estaban entretenidos con ellos, una treintena de jóvenes concentrados en la puerta del edificio hicieron una algazara. Una ventana se rompió en la refriega.

Los guardas la emprendieron a patadas y porrazos hasta desalojarles. Ya fuera, llegaron una veintena de beltzas de la Ertzaintza, que dispersaron a los alumnos.

El claustro siguió y aprobó una normativa que deberá ratificar el Consejo de Gobierno de la UPV y el Parlamento vasco. El reglamento también sancionará la copia de exámenes, agredir al personal de la Universidad o romper mobiliario. Los castigos van de la amonestación verbal a la expulsión. Además, si alguien causa desperfectos, se le obligará a pagarlos.

Fotos y reglamento en...

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