Cuatro personas se dejaron la vida en las carreteras catalanas durante este fin de semana. El peor siniestro tuvo lugar la noche del sábado al domingo, en Sant Pol de Mar, en la C-32. Dos turismos chocaron frontalmente y murieron dos personas. El sábado, el conductor de un turismo falleció al salirse de la N-240 en Vinaixa (Les Garrigues). El último accidente se registró ayer en Cubells (La Noguera), cuando dos turismos que circulaban por la C-26 chocaron lateralmente. Murió una persona. En el fin de semana anterior no falleció nadie en las vías catalanas. Durante la semana que acabó ayer eran ocho los fallecidos, lo que ha hecho disparar las alarmas en Trànsit. Se pide adecuar la velocidad y extremar las precauciones al adelantar. Ayer por la tarde se registraron retenciones de 24 kilómetros en las vías procedentes de los Pirineos.