Con las propinas de los clientes. Así se compraron el décimo agraciado esta mañana con el primer premio de la Lotería de Navidad cinco trabajadores del bar Tapas y Quesos, en la calle Mayor de Alicante.

La administración de Lotería número 23, a 50 metros del bar agraciado, ha vendido nueve series, "27 millones de euros" de forma "muy repartida" porque todo se vendió a través de la ventanilla.

"El décimo lo devolvieron de Elorrio y como tengo mucha familia allí elegí ese", asegura visiblemente emocionada la dueña del local, Sara Sánchez. La suerte ha querido que 300.000 euros recaigan, a razón de 60.000 euros por cabeza, en ella y sus cuatro trabajadores, uno de ellos ausente en la celebración de hoy porque está en su país festejando la fiesta del cordero.

¿Qué hacer con el dinero? Lo tienen claro, Sara va a "tapar agujeros" porque les "hace mucha falta", Alisson, un joven brasileño que lleva seis meses viviendo en Alicante,  se va a ir de vacaciones a Brasil a ver a su familia y Fátima, una madre argelina, lo va a destinar a ayudar a sus hijos.

Ayer me llamó mi hijo desde Argelia para pedirme 20 euros y no pude mandárselos porque no tenía dinero", comenta Fátima. Ahora, sus 60.000 euros van a ser para ayudarlos a ellos. La última en llegar a la celebración fue Amina, una joven marroquí, que no pudo reprimir su alegría al abrazarse con sus compañeros. "No sé qué voy hacer con el dinero pero estoy muy feliz", ha asegurado.

La suerte también ha recaído en el dueño de otro bar. El agraciado, Miguel Herrera, ya ha llamado a su familia, en Colombia, para darles la buena noticia. Compró un décimo hace unos días y ahora, con 300.000 euros en el bolsillo, pagará "las deudas con los bancos" e intentara ampliar su local.

En el Centro Comercial Puerta de Alicante, la Administración número 37 de Alicante, ha repartido otros tres millones de euros. Entre los agraciados: una pareja que se casa en unos meses y que prevé gastar los 300.000 euros en la compra de una vivienda.