A su llegada, los guardias civiles se encontraron con una pelea de pareja que derivó en insultos y gritos del hombre hacia la mujer. La víctima interpuso una denuncia y el sospechoso quedó detenido desde ese instante.

Lo curioso fue que, cuando los agentes entraron en el domicilio, a petición de la mujer, encontraron una rudimentaria plantación de marihuana, ubicada en el interior de un armario portátil de plástico, que ocupaba una de las habitaciones.

Los agentes intervinieron tanto las 37 plantas como multitud de semillas, productos para el tratamiento y crecimiento de las plantas y los precarios sistemas de ventilación e iluminación que tenía instalados..

Al detenido, un francés de 31 años, se le imputa un delito de violencia de género y otro de cultivo y elaboración de drogas. Ya ha pasado a disposición judicial y ha quedado en libertad provisional con cargos a la espera de juicio. Se le ha interpuesto una orden de alejamiento sobre la víctima, sin régimen de visitas al bebé.