Así lo ha indicado en una nota tras conocer los datos de este informe, que estima una producción de aceite en la provincia de Jaén de 360.000 toneladas, un 28,5 por ciento menos que la pasada campaña, mientras que para Andalucía, la sitúa en 884.900 toneladas, un 15,8 por ciento menos y en España, en 1.150.000, lo que supone una reducción de casi el once por ciento, y a nivel mundial en 2.854.000 toneladas.

"Con estas cifras se confirma la drástica disminución de cosecha con respecto al año pasado, situándola además como la cuarta peor campaña desde la 2000/2001. Estas previsiones, además, reafirman nuestra conclusión de la importancia de la concentración en estructuras fuertes y profesionales como el mejor camino para obtener unas rentas por encima de los costes de producción", han afirmado desde Interóleo.

En su opinión, con estas cantidades se puede hablar de una cosecha baja, motivada por las escasas lluvias que se han registrado tanto en primavera como en otoño, unidas a las altas temperaturas sufridas en los meses de verano. Además, si no vuelve a llover en las próximas semanas, la situación empeorará, haciendo que la producción se reduzca aún más. Los olivos sufren un estrés hídrico que no han paliado las últimas precipitaciones, "muy escasas".

"Ante esta situación, desde Interóleo volvemos a ratificarnos en nuestra conclusión de que el mejor camino de futuro para el sector es la concentración en estructuras sólidas, fuertes, con dimensión y profesionalidad para conseguir que los precios no bajen de los tres euros de media, una cantidad por encima de los costes de producción que consideramos razonable para garantizar la renta de los olivareros", ha destacado.

Ha señalado, por otro lado, que la reducción de cosecha en España se contrapone el resto de países de la Cuenca del Mediterráneo, puesto que en Italia, Grecia y Túnez, por ejemplo, se prevén aumentos de la producción. Esto "podría compensar la pérdida nacional" y "permitiría dibujar un escenario a nivel mundial de disponibilidades parecidas a la campaña anterior".

En este sentido, ha considerado que lo más destacable para el sector son las previsiones del Comité Oleícola Internacional (COI) de incremento del consumo en el mundo, lo que "marca claramente una tendencia muy positiva para los olivareros".

El grupo ha apuntado al respecto que "está preparado" para entregar a sus clientes aceites de la máxima calidad a nivel sensorial y analítico, además de estar capacitado para enfrentarse a los mercados de la manera más adecuada posible.

Estos aspectos "son bastante apreciados y reconocidos por los consumidores nacionales e internacionales" y permiten rentabilizar mejor las producciones. "Una estrategia que se consigue solo desde organizaciones con mayor dimensión que permiten afrontar adecuadamente nuevos retos", ha concluido.