El alcalde de Torremolinos (Málaga), José Ortiz, ha anunciado este martes una rebaja del 25 por ciento en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), además de la continuidad y ampliación de las subvenciones actuales para 2018, lo que va a significar "un doble impacto positivo en las rentas más bajas".

De esta manera pasaría del actual 0,98 a un 0,75, lo que supondría "un descenso directo sobre el recibo del IBI del 25 por ciento para el próximo ejercicio con respecto a 2017". Esta medida se ha podido llevar a cabo "gracias al superávit de 20 millones de euros registrados en 2016, a los que se sumarán los buenos datos tras la liquidación de 2017, que consolidan la senda de la estabilidad económica de cara a los próximos años, así como la importante reducción del pago medio a proveedores", ha informado Ortiz.

"Era nuestro compromiso desde que empezamos el mandato y, ahora sí, por fin, se puede bajar el IBI", ha subrayado, al tiempo que ha indicado que el equipo de gobierno llevará al pleno esta medida, que no se había podido poner en marcha "por la situación tan complicada en la que se encontraban las arcas municipales, que durante dos años nos hemos dedicado en cuerpo y alma a sanear", ha asegurado Ortiz.

También ha señalado que a finales de este mes se verá la reducción del pago medio a proveedores y el nivel de deuda.

Ha recordado que en 2015 el equipo de gobierno encontró una deuda "inmensa no reconocida, impagos y una situación caótica que nos ha obligado a reestructurar un plan de ajuste muy duro para una economía que era débil". Por ello, "el mayor reto", ha continuado, era superar "estas enormes dificultades financieras".

CRÍTICAS AL PP

Por su parte, la concejala de Hacienda y primera teniente de alcalde, Maribel Tocón, ha recordado que fue el Partido Popular "el que convirtió a Torremolinos en la ciudad con el IBI más caro de España".

Desde la segregación de Málaga, el municipio se había situado siempre en la media de su entorno, en concreto en el año 2003 se situaba en 0,66. "Es entonces cuando para afrontar lo que sería la tercera legislatura del PP en Torremolinos, el entonces alcalde Pedro Fernández Montes se da cuenta de que necesita más dinero para sus políticas populistas y ataca por un lado asfixiando a los ciudadanos, a los que sube el IBI al 1,1 en el 2004 y al 1,16 en 2007, el máximo que permite la ley; y por el otro endeudando a esta ciudad sin control", ha afirmado la edil.

Ha incidido en que el PP, "consciente del efecto electoral que podía tener este atraco al bolsillo de los ciudadanos y la deuda millonaria, se inventa unas subvenciones para los empadronados que todos sabemos que eran ilegales".

Tocón ha recordado que el equipo de gobierno se encontró "un Ayuntamiento técnicamente arruinado, con una deuda de 197 millones de euros y sin subvenciones, pero con el IBI más alto de la provincia".

"Esa era la situación real en la que estaba el Ayuntamiento cuando salió del gobierno el Partido Popular de Margarita del Cid", a la que ha respondido ante el reproche que la portavoz popular realizó esta semana en referencia al IBI.

RESPUESTA DEL PP

La portavoz 'popular', Margarita del Cid, ha criticado la "agresividad y el nerviosismo" del equipo de gobierno y que "lo único que certifica es la mala gestión que están llevando a cabo".

Ha lamentado los "permanentes insultos y descalificaciones" de Tocón, que demuestran, "aparte de su poca talla política, un nerviosismo inusitado que va más allá de su pobre gestión y que tendrá que explicar a qué se debe".

"Por mucho que nos ataquen el PP siempre va a estar del lado de los torremolinenses en asuntos como el IBI o en cualquier otra cuestión, le pese a quien le pese y no vamos a tolerar una absoluta falta de transparencia y una muy mejorable gestión respecto a unas bonificaciones por este impuesto que se han convertido en las más opacas y antisociales de la historia de este municipio", ha sostenido la portavoz del PP.

Del Cid se ha preguntado si después de dos años y medio de gobierno los actuales dirigentes de Torremolinos "no han encontrado un argumento mejor para ocultar los malos gestores públicos que son" que atacar a los 'populares', reclamando "calma y cordura".