Según ha indicado la Policía Local en un comunicado, el joven se escapó corriendo hacia la calle San Andrés al ver a los agentes, quienes consiguieron interceptarlo en la calle Galera. El joven, según han relatado los agentes, mostró en todo momento una resistencia activa:trató de escaparse, forcejeó, braceó y amenazó con golpear a los policías, quienes se vieron obligados a reducirlo.
El joven, quien tenía la cabeza con restos de sangre y manchas por la cazadora que llevaba puesta, tiró algo debajo de un vehículo estacionado en el lugar, que resultó ser una papelina que contenía una sustancia estupefaciente. Por este motivo, fue propuesto para sanción por infracción relacionada con drogas.
Asimismo, el joven insultó a los policías, se negó a identificarse y trató de grabar a los agentes mientras intentaba escaparse. Por todo ello, los policías lo detuvieron y lo trasladaron a un centro médico, en donde siguió mostrando una actitud violenta con ellos. Los agentes también fueron examinados en el centro médico.
El varón fue trasladado a dependencias policiales y puesto a disposición judicial.
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