De ese modo el juez desestima íntegramente la demanda contra Liberbank, al establecer que ese gasto es una obligación establecida legalmente para acreditar el valor de la garantía del préstamo y, en consecuencia, corresponde su abono al interesado y demandante del préstamo.
El fallo judicial, al que ha tenido acceso Europa Press, se fundamenta en las criterios y argumentos jurídicos sobre los gatos de formalización recogidos en las sentencias de la sección cuarta de la Audiencia Provincial de Oviedo respecto a los gastos de notaría, registro e impuesto de actos jurídicos documentos, y que el juzgado de Gijón hace extensivos a los gastos de tasación, ante la reclamación del demandante.
El juzgado considera que, siguiendo la argumentación de la sección cuarta de la Audiencia Provincial de Oviedo, los gastos de formalización son de cuenta del cliente porque "lógicamente, es el interesado en obtener el crédito quien deberá hacer frente a los gastos que ocasionen aquellos condicionantes que se le exigen para su concesión, salvo que por ley sean imputables al prestamista".
Este caso, la sentencia dictada en el juzgado de Gijón sigue la línea marcada por las audiencias provinciales de Pontevedra y de Alicante.
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