Zahara: "Tengo un máster en relaciones mediocres"

  • La artista acaba de publicar la novela 'Trabajo, piso, pareja', una historia sobre las relaciones de pareja en la mediana edad.
  • "No me gustan las comedias de los 90, son matrimoniadas", confiesa.
  • "Las relaciones son jodidas porque somos complicados, no por el género".
La artista indie Zahara acaba de publicar su novela 'Trabajo, piso, pareja".
La artista indie Zahara acaba de publicar su novela 'Trabajo, piso, pareja".
JORGE PARÍS
La artista indie Zahara acaba de publicar su novela 'Trabajo, piso, pareja".

Zahara (Úbeda, 1983) apoya sus manos en su cadera en el gesto típico que acompaña al embarazo mientras habla de su otro "hijo": la novela Trabajo, piso, pareja (Verso & Cuento), un libro que habla de las relaciones y su complejidad desde el prisma del humor y alejada de las historias convencionales. Al fin y al cabo, la vida real no incluye principios -ni finales- de cuento.

En su novela, los protagonistas (Marco y Clarisa) muestran sus inseguridades. ¿Qué miedos tiene una persona cuando cumple los 30?

Creo que, más que inseguridades, lo que hay son presiones sociales, esa continua pregunta del entorno de a qué te dedicas, si tienes pareja… ahí se forma la inseguridad. También esa típica frase de los padres de: "Yo a tu edad ya…". Continuamente tenemos la duda de si estamos haciendo lo que queremos o lo que dicen que tenemos que hacer.

¿Todo es presión o también buscamos inconscientemente la estabilidad de nuestros padres?

No creo mucho en el reloj biológico de ningún tipo, no creo que esa sensación de la que hablo no viene de dentro, si te lo preguntan constantemente no puedes evitar sentirte así. En mi caso, dedicándome a la música desde hace años, me han preguntado si trabajaba además de otra cosa, como si no fuera un trabajo suficientemente serio.

A los personajes de su libro, no trabajar 'de lo suyo' les produce mucha frustración.

Nuestros padres estudiaron lo que había más a mano porque lo importante era tener un trabajo, no una vocación. Nosotros podíamos estudiar lo que quisiéramos aunque no hubiera salidas, y al final tienes mil títulos pero trabajas de lo que hay, es inevitable la frustración.

A nivel sentimental, en la primera parte de su novela parece que es todo perfecto... hasta que llega la segunda.

[Risas] Sí, para mi la novela empieza sobre la mitad, pero era consciente de que no iba a generar empatía con los personajes, el lector tenía que ver el inicio de la relación. Quería hablar de que muchas veces acabamos viviendo en pareja por presión social y cuestiones económicas no por una decisión romántica. La convivencia no es sencilla, tiene que haber equilibrio, respeto por los humores ajenos...

¿Es difícil en una historia de amor escapar de los clichés de género?

No puedo soportar las comedias de los 90 y 2000 porque se basan en eso. Son matrimoniadas con Julia Roberts y Hugh Grant. Con esta novela quería dejar claro que las relaciones son jodidas porque somos complicados, no porque hombres y mujeres actúen diferentes. Los errores que cometen los protagonistas son más fruto de su generación que de su género.

¿Puede una artista indie citar a Fran Perea y a La Oreja de Van Gogh?

[Risas] Son referencias vintage. Toda la novela está llena de referencias de películas, novelas, música… esas dos imágenes las he tenido grabadas desde que les escuché y me encanta que la gente que lo lea lo comparta, sobre todo los fans de ambos artistas.

Tiene una relación muy buena con sus seguidores en redes sociales. ¿Le gusta o piensa más en una estrategia comercial?

Empecé subiendo fotos a mi Instagram de la gente que compraba mi libro como agradecimiento, pero cuantas más imágenes subía yo, más subían ellos. Obviamente sirve para ese márketing, pero nunca hago nada que no me apetece o que no mejore la relación entre mí y mis seguidores. Me gusta contestarles igual que a mí me gustaría que me contestase mi escritor favorito.

El protagonista de su libro está escribiendo una novela en la que sus personajes son calcados a otras relaciones que ha vivido. ¿También le pasó a usted al escribir?

Sí que meto detalles autobiográficos pero en mi caso son imágenes de mi vida, no personajes en concreto. Con Marco tuve que hacer un ejercicio de distanciamiento porque tenía muchas cosas en las que basarme, tengo un máster en la mediocridad de las relaciones, donde soy novata es en que me vaya bien [risas]. Tenía miedo coger demasiado de mí porque no sería un ejercicio de creatividad.  Si lo basaba en alguien con quien me había ido mal me iba a causar rechazo, tuve que crear alguien con quien me apeteciera hablar, acostarme…

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