El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) ha multado con 1.500 euros a una mujer que presentó hasta 11 querellas contra los magistrados que intervinieron en su pleito de separación matrimonial y custodia de una menor, al considerar que solo las interpuso para "intimidar a los jueces e intentar posteriormente su recusación".
La Sala de Gobierno del TSJC ha confirmado esta sanción después de rechazar el recurso de alzada que la mujer presentó contra la sanción que en febrero de este año le había impuesto la Sala Civil y Penal del mismo tribunal.
En esa resolución recogida, la Sala Civil y Penal sostenía que todas estas querellas contra los jueces, magistrados y fiscales fueron rechazadas porque "no revelaban más que el desacuerdo" de ella con las resoluciones judiciales por la custodia de la menor.
"El abuso de la jurisdicción y mala fe procesal es manifiesta, y tal realidad no puede desconocerse ni ser tolerada por los órganos judiciales", señalaba la Sala Civil y Penal, que advirtió hasta en cuatro ocasiones a la mujer de que seguir presentando querellas sin fundamento conllevaría una sanción.
Ahora, la Sala de Gobierno ha confirmado que esta sanción es procedente por una actuación de la mujer "carente de todo fundamento", que persistió en su actitud pese a las advertencias claras y rotundas de la Sala Civil y Penal sobre una posible multa.
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