En una nota, Campo ha afirmado que "la provincia no es ajena al castigo que los PGE 2017 han supuesto para toda Andalucía, con un descenso en la inversión del 32,6 por ciento", y "dan la espalda a los problemas reales de la ciudadanía y cierran puertas a los retos de nuestro territorio".

"Estamos ante unos presupuestos que consolidan los recortes y que en esta provincia renuncian al objetivo primordial que toda administración pública debería tener y que es combatir el desempleo", ha enfatizado, recalcando que "no hay un plan de empleo específico, sufrimos un parón en infraestructuras, no hay una apuesta clara por Navantia que solo recibe del Ministerio de Defensa 1,9 millones, el Reindus de nuevo aparece mermado y encima las ayudas quedan desiertas por las dificultades de acceso de las empresas, la Zona Franca solo piensa en seguir siendo un agente inmobiliario y en su expansión por la provincia, y la ITI está desaparecida".

Según el diputado del PSOE, "la realidad es que los 243 millones destinados por el Gobierno de Rajoy a la provincia dan para muy poco, pero lo peor es que lo poco que pintan en los PGE, no lo ejecutan, y esto es lo verdaderamente trascendente de toda esta historia".

Además, ha subrayado "la tropelía" respecto a la Algeciras-Bobadilla, "una obra que en el último Gobierno socialista recibió una partida de 202 millones de euros para el tramo San Pablo de Buceite-Ronda y desde entonces, en seis años no ha avanzado una traviesa pese a estar el corredor ferroviario considerado de máximo interés por Bruselas".

"No estamos ante una cuestión coyuntural como quiere hacernos ver Antonio Sanz", ha manifestado Campo, que ha señalado que "en los peores años de la crisis, en los presupuestos de 2008 a 2011, el PSOE invirtió en esta provincia hasta 2.443 millones de euros, mientras que el PP en los ejercicios de 2012 a 2017 ha destinado solo 1.923".

Por ello, el dirigente socialista ha afirmado que "son unos presupuestos para salir del paso, irreales, elaborados desde la inseguridad y con total falta de convencimiento, en ese modo tan apático de comportarse que tiene Rajoy. Unos presupuestos de renuncias".