La senadora de Podemos por Álava Elvira García ha abandonado la formación morada y se ha pasado al Grupo Mixto antes de que el partido tramitase su expulsión por no haber pagado al Gobierno Vasco su piso de protección oficial cuando ya ocupaba su cargo en la Cámara Alta.

García ha comunicado su decisión mediante un mensaje enviado a varios responsables de Podemos, a los que ha manifestado su renuncia a todos los cargos en el partido -no así al escaño, que es personal- y a quienes ha trasladado su malestar por la situación vivida, han informado fuentes de la formación morada en Euskadi.

"Nada sé de los cargos que se me oponen, ni de ningún expediente abierto contra mí ni de mi oportunidad de defenderme y dar explicaciones", relata la senadora en un comunicado enviado a la Cadena Ser, en el que asegura que la dirección nacional le garantizó que su problema era de carácter "administrativo" y que se solucionaría "sin ninguna repercusión adicional" una vez que abonase sus donaciones atrasadas al partido, con las que tampoco había cumplido.

Elvira García tenía una orden de desahucio de su piso de Vitoria después de 15 meses de impago de alquiler de una vivienda social y acumular una deuda de 3.000 euros, que al parecer finalmente evitó al pagar 5.000 euros a la sociedad del Gobierno Vasco que gestiona las viviendas de alquiler protegido, Alokabide.

El caso suscitó críticas del grupo del PP en la cámara alta que indicó que cuando el Departamento Vasco de vivienda inició los trámites de desahucio la senadora de Podemos ya llevaba cuatro meses en el Senado por lo que no tenía el perfil de demandante de este tipo de pisos de alquiler social.

También el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, censuró que Podemos "no dijera ni mu" del caso cuando los representantes de este partido hablan en la tribuna "como si fueran paladines de la rectitud", mientras la plataforma Stop Desahucios calificó la situación de "no comprensible".

En declaraciones a Onda Vasca, el secretario de organización de Podemos Euskadi, Lander Martínez, ha señalado que con el abandono de la formación por parte de la senadora "da por zanjada" la situación generada, aunque ha "asumido" que la "reacción" del partido "no ha sido todo lo rápido que debería".

Martínez ha subrayado que su opinión sobre el asunto es que "una persona que se ha presentado a unas elecciones por parte de Podemos y ocupa un escaño" en el Senado debería abandonarlo si ha dejado la formación a la que representó .

En este sentido, ha incidido en que "tenían certezas de que no se realizaban las donaciones de salario al partido", lo que condujo "a acciones" por parte de la dirección de Podemos Euskadi que "fueron remitidas a la ejecutiva estatal, que tiene en sus manos toda la información".