Unos 150 inmigrantes fallecieron hace trece días en el Atlántico cuando se partió en dos la barcaza en la que viajaban con rumbo a las costas de Canarias.

Al menos, esto es lo que publica este viernes un diario senegales, cuya información ha sido recogida por Cadena SER.

Según el rotativo,  140 de los ocupantes procedían de Kolda, al este de Casamance, al sur de Senegal. Solo diez de ellos pudieron ser rescatados con vida por unos pescadores cerca de Nuadibú.

Las autoridades españolas, sin embargo, no tienen constancia de este suceso ni de sus consecuencias.

De confirmarse, se trataría de la mayor tragedia de cayucos sucedida hasta la fecha teniendo en cuenta el número de víctimas.

Siete muertos y 49 desaparecidos

La noticia llega un día después de que el Ministerio del Interior informara de que unas 57 personas procedentes del puerto de Mauritania podrían  haber muerto a bordo del cayuco en el que viajaban rumbo a las costas canarias.

En este caso, el motor de la embarcación falló, por lo que la nave estuvo navegando varios días a la deriva.

Según el armador del pesquero que rescató al único superviviente del suceso, "a medida que iban muriendo (los ocupantes del barco) los echaban al mar".

En la nave fueron hallados, además, siete cadáveres. Este viernes la embarcación "Esperanza del Mar" viajaba a Senegal para entregarlos, así como al superviviente, a sus autoridades, .