En un comunicado, el departamento vasco de Seguridad ha informado de que varias comisarías de la Ertzaintza han trabajado coordinadas en el seguimiento y vigilancia del grupo criminal, cuya desmantelación se ha producido cuando el grupo preparaba un nuevo robo en un supermercado en plena campaña de Navidad.

En su último golpe, los delincuentes accedieron al interior por el tejado, tras desatornillar y cortar varias placas metálicas, neutralizaron las alarmas y posteriormente avanzaron por el falso techo hasta la caja fuerte, donde manipularon el sistema de enlace con las cajas registradoras para acceder al dinero procedente de las mismas.

Después de este robo, se tuvo constancia de otros intentos fallidos, en sendos establecimientos de Gernika y Ordizia, donde se localizaron butrones en el tejado. Los golpes habrían sido abortados por la presencia preventiva de patrullas policiales.

Las investigaciones practicadas por la Ertzaintza permitieron identificar a dos de los posibles integrantes de la banda y situar su presencia en el entorno y fechas de varios de los robos, especialmente en labores preparatorias de los mismos.

Agentes de la Ertzaintza detuvieron el pasado día 27 de diciembre a dos hombres, uno en Arrasate y otro en Deba, y localizaron en su domicilio herramientas especializadas para la comisión de los robos: un extractor de bombillos de cerradura, cortadoras de chapas metálicas, taladros, rotaflex, etc.

También había instrumentos de alta tecnología para las labores de vigilancia, como microcámaras, o medidores de campo para analizar señales e interferir en los dispositivos de seguridad de los establecimientos. Uno de estos aparatos, valorado en unos 6.000 euros, constaba como sustraído en una empresa de Lazkao. También se localizaron varios miles de euros ocultos en el cuarto de baño de la vivienda.

Además, la Ertzaintza puso a disposición judicial dos vehículos utilizados por los detenidos en sus desplazamientos. Los dos detenidos, que poseen antecedentes delictivos, han sido ya puestos a disposición judicial, ingresando uno de ellos, el presunto jefe del grupo, en prisión mientras el otro quedaba en libertad con cargos.

Las investigaciones de la Ertzaintza continúan para esclarecer otros posibles robos cometidos por los detenidos y para identificar y localizar a otros posibles integrantes de la banda.