El Ayuntamiento de Barcelona cederá gratuitamente a la Generalitat dos solares en la Zona Franca de Barcelona para construir dos nuevos equipamientos penitenciarios que sustituirán a la prisión de La Modelo, situada en el corazón de la ciudad, y el centro abierto del barrio de Trinitat Nova.

Este es uno de los puntos que recoge el convenio que han firmado este martes en la misma Modelo el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, acompañados del conseller de Justicia, Carles Mundó, y la concejal de Urbanismo, Janet Sanz.

Aunque a preguntas de los periodistas no han querido prometer un plazo para el cierre de La Modelo, han coincidido en que la firma de este convenio supone poner en marcha "la cuenta atrás" para su clausura.

El vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras; y el conseller de Justicia, Carles Mundó; por parte del Govern, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, por parte municipal, han firmado hoy en la cárcel Modelo el convenio, que compromete a ambas instituciones para los próximos años, independientemente de quién las gobierne.

Según el convenio, el Ayuntamiento de Barcelona se compromete a ceder dos solares en la Zona Franca de la capital catalana -valorados en unos 15 millones- para construir dos centros penitenciarios, que sustituirán a la prisión Modelo y a la de régimen abierto de Trinitat Vella, solar donde el consistorio construirá 265 viviendas sociales, 110 destinadas a realojar vecinos del barrio.

Para construir esos pisos de protección, el Ayuntamiento de Barcelona comprará por 5,5 millones a la Generalitat las dos terceras partes del terreno que ahora ocupa la prisión de Trinitat Vella, un tercio del cual es de titularidad municipal.

Las fincas que ocupa la cárcel Modelo son ahora titularidad del Ayuntamiento de Barcelona -como preveía el protocolo firmado por Trias- y, según ha explicado Colau, se destinarán a los usos que se han acordado con los vecinos, entre los que figuran equipamientos como una guardería, una residencia de ancianos, un centro para jóvenes y una zona verde.

Además, aunque todavía está pendiente de las conversaciones con los vecinos, Colau ha dado por hecho que una parte de la Modelo será conservada como espacio para la memoria histórica, al tratarse de una cárcel muy vinculada a la"represión, la dictadura y los años más oscuros de la ciudad de Barcelona".

En el plazo de un mes, está previsto formalizar la escritura para la compra-venta del edificio de Trinitat Vella donde el Ayuntamiento construirá pisos sociales y los trámites para la cesión de los terrenos de la Zona Franca que acogerán los nuevos centros penitenciarios, que está previsto que sumen 68.000 metros cuadrados y una inversión de 110 millones de euros.

Según lo pactado, en 2018 estarían listos los trámites urbanísticos necesarios para que la Generalitat pueda construir los nuevos centros y organizar el traslado de los presos que ahora alberga la cárcel Modelo, lo que tampoco tiene fecha.

El cierre de la cárcel Modelo de Barcelona, que actualmente alberga a unos 700 presos preventivos, es una histórica reivindicación de los vecinos de las dos manzanas del barrio barcelonés del Eixample que ocupa, quienes en varias ocasiones han visto incumplidas las promesas políticas de desmantelamiento del edificio.

La prisión, construida en 1904, albergó durante la Guerra Civil y el franquismo a numerosos presos políticos y condenados a muerte, con cerca de 14.000 reclusos entre sus rejas.