Las incidencias por violencia escolar registradas en los colegios e institutos de la Comunitat Valenciana aumentaron el pasado curso 2015/2016 un 16% y se situaron en 3.406, frente a las 2.938 del ejercicio anterior. Los datos del Programa Previ de la Conselleria de Educación reflejan un incremento que desde el departamento que dirige Vicent Marzà atribuyen no tanto a un aumento de la conflictividad escolar, sino a una mayor comunicación y denuncia de los casos.

De hecho, la subida es sostenida, pues se ha pasado de las 1.800 comunicaciones de hace tres cursos a las 2.938 de hace dos ejercicios y a las 3.406 actuales. El director general de Política Educativa, Jaume Fullana, sostiene que este aumento "no se debe tanto a que haya más problemas en los centros educativos, sino a una mayor concienciación en la comunicación de los casos".

En este sentido, Fullana destaca la mejora de instrumentos como los planes de acción tutorial, los planes de atención a la diversidad y de convivencia, en los que actúan equipos de mediación y se ponen en marcha tertulias y grupos. Son, en definitiva, herramientas que permiten aflorar situaciones de conflicto que hasta hace pocos años pasaban inadvertidas y no se denunciaban, por lo que no se podía actuar sobre ellas.

Respecto a la tipología de casos, en el 61,62% está presente la violencia verbal, es decir, los insultos y amenazas; en el 56,13% la violencia física, en el 7,4% a violencia sexual y en el 10,36% hay violencia por exclusión, mientras el 7% de las incidencias son por ciberacoso. En más de la mitad de los casos, las personas implicadas eran alumnos de los propios centros, según se detalla en la estadística.

El hecho de que se hayan registrado más comunicaciones "permite abordar mejor los casos y tener un bagaje", explica el director general. Una dinámica que también se da en el caso del ciberacoso, aquel que se produce a través de las nuevas tecnologías, como los teléfonos móviles o las redes sociales. Fullana destaca que su incidencia se ha estabilizado en torno al 7%."Se ha mejorado mucho la comunicación respecto al acoso escolar. Se identifican y comunican más casos", asegura.

En cuanto a la intervención, Fullana explica que la Conselleria de Educación ha creado para el presente curso las Unidades de Atención e Intervención (UAI) dentro del Programa Previ, lo que supone que por primera vez habrá equipos de trabajo fijos dedicados a la prevención de la violencia escolar y a la actuación en los casos más graves.

Básicamente, se trata de una ampliación de los recursos. Desde el departamento de Campanar confían en que estos equipos de intervención especializada permitan "mejorar las cifras de incidencias registradas de los últimos cursos, y llevar a cabo unas intervenciones que mejoren la convivencia en los centros" de la Comunitat Valenciana.

Cada UAI está formada por un inspector de Educación y un asesor técnico docente, que debe ser un profesor de la especialidad de Orientación Educativa. Además, también se podrán incorporar otros asesores técnicos como refuerzos. De hecho, el número de miembros de las UAI varía en función del tamaño de cada Dirección Territorial: en la de Castellón son dos personas, en la de Alicante tres y en la de Valencia cuatro.

Las tecnologías de la información y de la comunicación ofrecen un abanico de nuevas posibilidades en el campo educativo, pero también pueden ser utilizadas como canal de acoso escolar. Durante el curso pasado, en la provincia de Valencia, la incidencia por violencia escolar se produjo a través de redes sociales en el 3,7% del total de los casos; en un 3,1% a través de chats; en el 1,5% se trataba de mensajes SMS o MMS y en el 0,3%, respectivamente, a través de foros de Internet o de correos electrónicos.