Adecuar la normativa a las exigencias europeas y, especialmente, a la realidad social. Estas son las principales bases sobre las que se asentará la nueva Ley contra la Violencia de Género, cuyo anteproyecto de reforma fue aprobado este martes por el Consejo de Gobierno.

La futura norma andaluza, que sustituirá a la actual, vigente desde 2007, amplía el concepto de víctima de malos tratos para extenderlo también a los hijos de las mujeres maltratadas, extremo que el Ejecutivo andaluz ya llevaba a cabo en la práctica y que ahora quedará amparado por ley. Y se incluye el término "mujer víctima" a las menores de edad, de manera que estas puedan recibir la misma asistencia específica que se presta a las adultas.

Otra de las novedades de esta reforma es la inclusión en el texto de otros tipos de violencia, más allá del ámbito de la pareja o la expareja. Así, la futura ley definirá como violencia de género no solo el "feminicidio", entendido este como el "homicidio o asesinato cometido como instrumento para dañar a la mujer", sino también el acoso y las agresiones sexuales; la violencia contra los derechos sexuales y reproductivos; la trata de mujeres y de niñas; la explotación sexual; la mutilación genital femenina; el matrimonio precoz o forzado; la violencia originada por tradiciones culturales que atentan contra el derecho de las mujeres; la derivada de conflictos armados; la ciberviolencia, a través de internet y, especialmente, de las redes sociales; y cualquier otra forma susceptible de lesionar la dignidad, integridad o libertad de las víctimas.

Asimismo, la ley andaluza incorporará un sistema de atención integral a través de la ventanilla única. Y regulará el derecho, ya existente, a recibir una "atención adecuada" y una "solución de habitabilidad" sin necesidad de haber interpuesto una denuncia previa. Por último, la normativa "blindará", según la consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, los Centros Municipales de Información a la Mujer como "unidades de referencia de atención e información a las víctimas de violencia de género".

Con todas estas modificaciones, Andalucía "será pionera" en adaptar su legislación a las exigencias del Convenio de Estambul de 2011, el primer instrumento vinculante de ámbito europeo en esta materia y que "aún no se ha trasladado al ordenamiento jurídico español".

Además, el borrador de modificación legislativa aprobado se sitúa en línea con la propuesta de Pacto de Estado para la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres que el Gobierno andaluz remitió el pasado 11 de noviembre al Ejecutivo central, ya que gran parte de las medidas planteadas en este documento son de competencia estatal o requieren de una "mejor coordinación entre administraciones".