Xoel López: "Me cuesta la vida tener éxito, pero nunca me cambiaría por otro"

  • "Me sorprende tener éxito, pero también es verdad que hay mucho trabajo detrás", dice el artista gallego que termina la gira de 'Paramales'.
  • "He tenido la suerte de ser educado sin Internet y que mi madre me leyera poesía".
  • "No me cambiaría por otro, prefiero el equilibrio, ya le he visto las orejas al lobo y puse cortafuegos".
Xoel López presenta 'Paramales'
Xoel López presenta 'Paramales'
LOLA GARCÍA GARRIDO
Xoel López presenta 'Paramales'

Libre, que es como le gusta definirse, el gallego de 1977 Xoel López, a punto de rozar los 40, llega al final de la gira de su disco Paramales con el concierto de Madrid el 27 de octubre en La Riviera; y de Barcelona el 29 del mismo mes en la Sala Apolo.

Un álbum, el duodécimo en su carrera y el segundo en solitario, que es su trabajo más personal y en el que hay una canción, Todo lo que merezcas, que debería ser asignatura obligatoria, pero no en los colegios, en los trabajos, y aún más: en la vida.

¿Le sorprende el éxito de un trabajo tan personal, tan alejado de los circuitos?

Me sorprende, pero también sé todo el trabajo que hay detrás.

Así que sorprende, pero también es un poco de justicia, ¿no?

Hay más trabajo que en otros casos, sí. Me cuesta la vida tener éxito, no te voy a decir lo contrario; pero nunca me cambiaría por otro. Hay caminos más directos, los que te hacen famoso de la noche a la mañana, pero ése no es el mío.

Bueno, aunque haya sido o sea por el camino largo, ahí está usted...

Sí, estoy, es un éxito relativo, pero estoy. Y no me cambiaría por otro. Ésta es mi identidad. Y todo cuesta mucho trabajo.

Podría, pese a haber trabajado tanto, no haber llegado, ¿o es de los que cree que si se trabaja mucho se logra?

No, es verdad que podría no cuajar por mucho que uno lo intente.

De todos modos, ¿es esperanzador que algunos como usted lleguen?

Sí, aunque también ahora hay más diversidad de posibilidades. Y también hay mucha más gente, y más profesional, mucho más preparados.

¿Por qué entonces parece que la letra fuera perdiendo valor?

Conozco muchos letristas muy buenos en España y quizá sus letras sean importantes en el futuro.

¿Qué es lo más duro?

Lo más duro es lo físico y lo emocional, que cuesta mucho trabajo. Llegas al final con la energía justa. Cada concierto es para mí un esfuerzo, porque intento darlo todo, es mi manera de entender la vida. No es muy práctica la idea pero es más bella. También es difícil la salida de un trabajo.

¿Cómo aguanta?

Cada vez que saco un disco estoy con la nariz tapada hasta que veo que puedo respirar. Y luego nunca va ni tan bien ni tan mal. Es un equilibrio en el que vive mi música, pero es muy gratificante.

Y es más sereno...

Yo intento mantenerme en ese equilibrio. En 2009 me di cuenta de que no soportaría estar fuera de este equilibrio, vi las orejas al lobo, de repente no tenía tiempo para vivir ni para crear desde un lugar de verdad sincero. Puse cortafuegos y ya no me hará daño.

¿A salvo?

Eso espero al menos.

¿Qué canción de Paramales le toca más?

Patagonia. Me emociono tocándola, me toca la fibra. Todas lo hacen, porque todas tocan muchos rincones de mi corazón. Pero Patagonia es mi niña mimada.

¿Acierta con sus apuestas antes de publicar sus álbumes?

Pues no me ha pasado. De hecho esperaba con algunas canciones tener más éxito. Hay una, Sol de agua, que me gustaba y creí que gustaría, pero ya me dijeron que no iba a funcionar.

¿Y al revés?

No, nunca me ha pasado que una canción mía tuviera más éxito del que esperaba (risas).

¿Hace la música que le gustaría escuchar?

Es inevitable hacer la música que te gusta escuchar. Siempre se hace una transformación de todo lo que uno ha escuchado.

Y se queda usted en carne viva...

Sí, y a veces te da pudor escribir sobre lo que te pasa, y ahí la gran aliada es la metáfora. Permite además que cada uno haga la lectura que quiera y se identifique más.

Como con un buen libro...

Sí, eso es lo que me gusta, que se pueda identificar la gente.

¿Lee usted mucho?, ¿poesía?

Me gusta mucho la poesía y siempre son referentes. Mi madre me leía siempre la generación del 27  y el 98, todos pasaron por mi habitación. Tuve la suerte de crecer cuando no había Internet. No sé si hubiera tocado la guitarra tantas horas de haberlo tenido.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento