La atención de urgencia en quirófano a 21 refugiados, la mayoría de ellos menores de edad, ha provocado un nuevo cruce de acusaciones entre el Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad. La polémica ha saltado este jueves por la mañana cuando la delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, ha asegurado que el Gobierno regional ha dado una respuesta negativa al plantearle que posibilitara operaciones quirúrgicas de urgencia a una veintena de refugiados.

"Sigo impactada", ha confesado Higueras, que ha relatado que en la tarde del pasado miércoles recibió una llamada de un "colaborador" del consejero de Sanidad, Jesús Sánchez Martos, en la que le anunciaban la negativa regional. La delegada ha comentado que la ayuda se había pedido inicialmente al Gobierno regional por ser la Administración con competencias en materia sanitaria y que en una reunión previa mantenida con el consejero, la Comunidad avanzó  que prestarían la ayuda y que incluso la incrementarían. "Me dijo (Sánchez Martos) que garantizaba además la revisión médica de toda la familia", ha asegurado. También que esa atención médica para las 21 personas identificadas iba a producirse rápidamente.

Sin embargo, una llamada telefónica cambió todo. "Me dijeron que no nos van a apoyar en este proyecto y que nos dirijamos al Ministerio, al Gobierno de España", ha indicado la también primera teniente de alcalde. "No salgo de mi asombro", ha manifestado la edil. Tampoco le dieron una razón para explicar la negativa, únicamente que "la política de refugiados la centraliza el Ministerio".

Poco después, Jesús Sánchez Martos ha asegurado que dijo que sí operaría a los 21 refugiados que les pidió el Ayuntamiento de la capital, al que ha acusado de "deslealtad". "Se les dice que sí, que el Gobierno de Madrid no ha dicho que no a nadie, con papeles o sin papeles", ha aseverado el consejero de Sanidad, quien ha relatado que explicaron que es un tema que tiene que ver con la Consejería de Asuntos sociales y con una política Europea y del Ministerio de Asuntos Exteriores.

Esos 21 refugiados que necesitan una intervención urgente, como el caso de una niña de cinco años que puede quedar ciega por la metralla recibida en los ojos, fueron detectados en los desplazamientos que han hecho representantes del Ayuntamiento a los campos donde se concentran. Todos los afectados cuentan con el preceptivo informe médico que "acredita que si no reciben atención esas lesiones serán irreversibles".