Así lo ha comunicado este mismo viernes la propia empresa, que ha indicado que finalizar este buque permitirá al astillero volver a contar con carga de trabajo; concretamente, requerirá un total de 800.000 horas de trabajo.
La dirección, que ha puesto en valor "el esfuerzo de todas las partes implicadas durante los últimos meses" en la consecución de este acuerdo y la labor realizada por la Xunta, ha trasladado que, "dado el estado de desarrollo de proyecto", el trabajo se podrá reanudar "inmediatamente" una vez que entre en vigor el contrato.
El astillero llevaba tres años buscando armador para el ferry a medio hacer; en este tiempo, su única ocupación han sido pequeños trabajos de calderería, y la construcción de una rampa para el Puerto de Vigo, motivo por el que sus trabajadores han ido encadenando más de una docena de Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) de carácter temporal.
El ferry tiene 139,1 metros de eslora, 22 metros de manga y un peso muerto de 2.300 toneladas y puede alcanzar una velocidad en servicio de 21,8 nudos. En total, puede transportar a más de 1.500 pasajeros, en 52 camarotes, y dispone de 1.985 metros lineales para llevar coches y 609 metros para trailers.
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