El dominio de Amazon en el negocio editorial —ahora mismo acapara en torno al 45% de los libros que se venden en Estados Unidos— se extiende ahora incluso a la uniformidad de estilo en el diseño de los libros físicos.

Como consecuencia del empuje del sector digital, los editores están animando a sus diseñadores a crear cubiertas brillantes y llamativas que llamen la atención de los compradores online. El resultado está siendo la profusión de portadas color amarillo brillante con grandes letras y dibujos negros que producen un gran contraste visual, explica The Wall Street Journal.

"Hay un tipo de actitud maximalista hacia el color, creo que principalmente porque operamos desde el supuesto miedo de que nadie va a mirar el libro a menos que te grite directamente a ti", explica Peter Mendelsund, director de arte asociado de Knopf y autor de los libros Cover y Qué vemos cuando leemos.

A la hora de llamar la atención, todo se reduce a lo que puede percibirse en un golpe de vista. De este modo, los colores, el tamaño de las letras y los detalles gráficos se convierten en algo fundamental a la hora de que la portada de un libro destaque frente a otras.

El blanco siempre da un buen contraste pero no produce un gran impacto visual. El amarillo, en cambio, sí cumple ambos requisitos. Además, se trata de un color que no tiene un significado único definido y pude asociarse a multitud de géneros y temas.

Aunque esta situación es especialmente llamativa en EE UU, un buen ejemplo español es El libro troll, del youtuber El Rubius. Sus seguidores son totalmente público online y para el libro se optó por una cubierta amarilla.