Conchita, Herrera y Wapa no cabían en los planes vacacionales de sus familias y las tres perritas pasaron a engrosar este agosto la larga lista de animales ‘sin techo’. Un fenómeno, el del abandono animal, que cada año aumenta exponencialmente y que puede hacer de 2007 "el año más negro", según denuncian las protectoras.

"La última estadística oficial de la Comunidad de Madrid reconoce que en los primeros seis meses se recuperaron más de 8.000 animales abandonados, con lo que previsiblemente se superarán los 14.100 del año pasado", augura Nacho Paunero, de la ONG El Refugio.

Perros de usar y tirar

La responsable del centro de protección animal del Ayuntamiento de Madrid, María José Montes, reconoce que se trata de una situación alarmante. "La gente ha convertido a los perros en objetos de consumo, de usar y tirar, y estamos alcanzando límites insoportables de abandono de perros", explica.

Las protectoras critican la falta de campañas de concienciación por parte de la administración pública. Sin embargo, la Comunidad cree que cada vez se recuperan más animales desahuciados por el incremento de los recursos para su recogida.

Protectoras y administración coinciden en que el verano ya no supone un pico en el abandono animal, pues se echan de casa mascotas en cualquier época del año, pero es cuando los ciudadanos están más atentos y avisan más a las protectoras del desamparo de perros y gatos vagabundos. Para los perros, la única salvación es la adopción, algo que esperan Conchita, Herrera y Wapa.

Tres historias del centro de adopciones de El refugio

‘Conchita’ Cruce de braco

Un voluntario de la ONG El Refugio se la encontró en Consuegra (Toledo). Es una hembra, cruce de braco, de aproximadamente cinco meses de edad. La perrita estaba herida en una pata y muy asustada. Ahora se encuentra, recuperándose, en el Centro de Adopción a la espera de una familia que la adopte.

‘Herrera’ Cruce de pastor alemán

Es una hembra, cruce de pastor alemán, de aproximadamente un año de edad. Los trabajadores de una fábrica de un polígono industrial de Madrid fueron quienes avisaron a El Refugio de que durante la noche les habían arrojado la perra dentro de sus instalaciones. Ahora Herrera que es muy simpática y cariñosa con todos, busca una familia.

‘Wapa’ Mestiza

Esta perra blanquita, mestiza y de cinco meses de edad, fue abandonada la pasada semana en una gasolinera en el término municipal de Coslada. La persona que la recogió acercó a la perra hasta las instalaciones de El Refugio, donde ahora, una vez bautizada como Wapa, busca el que será su hogar definitivo.