El Centro Jurídico Tomás Moro ha pedido al Gobierno regional que proteja a todos los menores que han tenido que sufrir la perdida de sus padres a manos de sus madres, y de esta manera, aunque los menores tengan a sus madres vivas cumpliendo condenas, puedan beneficiarse de los recursos públicos para evitar una contradicción jurídica.

Este centro de derecho ha realizado esta petición al hilo de que el Gobierno regional, con ocasión del Día Internacional de la Mujer celebrado el pasado 8 de marzo, anunciase la elaboración de una nueva Ley Regional para la Prevención de la Violencia de Género, para que los niños que han perdido a sus madres a causa de la violencia de género, sean considerados huérfanos para que puedan acceder a las ayudas de solidaridad.

A pesar de aplaudir la iniciativa, este Centro Jurídico ha indicado que le preocupa que la nueva legislación que está en fase de borrador "establezca una injusta discriminación entre los niños huérfanos como consecuencia de la violencia doméstica".

Así, ha precisado que aunque desde el año 2011 no existen datos oficiales sobre el número de hombres fallecidos a manos de sus parejas femeninas, sin embargo en el año 2009 (según datos del Consejo General del Poder Judicial) murieron 10 varones a manos de sus parejas femeninas y 55 mujeres a manos de sus parejas masculinas.

En muchos de los fallecimientos como consecuencia de la violencia doméstica (independientemente del sexo del agresor) se constata la existencia de menores que constituyen víctimas colaterales de los conflictos de pareja y que necesitan ayuda y reparación.

"Por ello no comprendemos la limitación de protección únicamente a los menores que han sufrido la tremenda pérdida de sus madres, pues consideramos que los niños que han perdido a sus padres por culpa de la violencia doméstica también están necesitados de la misma protección", han insistido.