La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha pedido este miércoles al Gobierno central y a la Generalitat regular para evitar "un nuevo ciclo especulativo de la vivienda" y otro burbuja inmobiliaria, después de que el precio medio del alquiler haya subido en Barcelona un 6,6% en un año, siendo la ciudad española en la que más ha incrementado en este periodo.

En rueda de prensa junto al concejal de Vivienda, Josep Maria Montaner, Colau ha criticado que "la Generalitat y el Estado no están haciendo sus deberes", y ha apostado por estudiar experiencias europeas, como las medidas impulsadas en Alemania, donde en Berlín se limita el precio del alquiler cuando no coincide la oferta con una alta demanda residencial.

Tras resaltar que el Gobierno central es la administración que tiene mayoritariamente las competencias en vivienda, se ha ofrecido a colaborar tanto con éste como con la Generalitat, y ha señalado que ya se lo transmitió al presidente del Govern, Carles Puigdemont, cuando se reunió con él en febrero.

"Desde el Ayuntamiento nos mostramos absolutamente disponibles a colaborar", ha insistido Colau, que ha reiterado su voluntad de cooperar en normativas como una eventual ley de arrendamientos urbanos de la Generalitat y el reglamento sobre deudas hipotecarias también del Govern.

Tras resaltar que alrededor del 30% de la vivienda en Barcelona es de alquiler y defender la tarea en este ámbito de entidades como la PAH --de la que fue portavoz--, la alcaldesa ha insistido en la necesidad de impulsar una regulación, y ha aseverado: "Si hemos llegado a esta situación, es por las leyes estatales que no sólo no impidieron la burbuja inmobiliaria, sino que la alimentaron".

"Si hemos llegado a esta situación es por la burbuja inmobiliaria y la especulación de la vivienda. Tenemos que aprender de los errores del pasado, y es obligación de las administraciones públicas no sólo hacer frente a la crisis e intentar recuperar los restos del naufragio, sino también hacer lo máximo posible para evitar que se repita, y esto no está haciendo", ha avisado.

La primera edil ha insistido en alertar de que, el hecho de que "no se haya modificado la legislación sobre vivienda y que sea tratada como mercancía y no como derecho, está permitiendo que empiece un nuevo ciclo especulativo".

Montaner ha resaltado que años atrás entidades y tanto él como la ahora primera edil alertaron de la burbuja pero "no hicieron caso" -ha remarcado que entonces Colau era portavoz de la PAH y que actualmente es alcaldesa-, y que ahora vuelven a alertar de un incremento de los precios del alquiler que considera insostenible.

Un estudio elaborado por el Ayuntamiento revela que el precio medio del alquiler por contrato en el mercado se situó en los primeros nueve meses de 2015 en los 727 euros, un 6,6% más que en el mismo periodo de 2014, mientras que el precio según unidad de superficie se incrementó en un 7,4%, alcanzando los 10,9 euros al mes por metro cuadrado.

Los distritos en el que más ha aumentado el precio medio del alquiler por contrato han sido Les Corts -un 8,7%, alcanzando los 914 euros- y Sant Martí -un 8,6%, llegando a los 692-, y el estudio revela que los ciudadanos que destinan más parte de sus recursos a pagar el alquiler son los que viven en barrios de rentas bajas, y que los que realizan más esfuerzo son los de Trinitat Nova, la Verneda, la Pau, la Guineueta, Sant Martí de Provençals y la Prosperitat, que destinan más del 25% de sus ingresos a pagar el alquiler.

Colau ha anunciado este martes que el Ayuntamiento ha incorporado al parque de vivienda pública 255 pisos a través de cesiones, adquisiciones y el ejercicio del derecho de tanteo y retracto, que se suman a los 200 que cedió la Sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria (Sareb) en diciembre, sumando un total de 455 en lo que va de mandato.

Ha detallado que, de los nuevos 255 pisos, 50 provienen de cesión por parte de BuildingCenter -sociedad que gestiona los activos inmobiliarios de CaixaBank-; 131 de la adquisición a precios por debajo de mercado, y 28 por haber ejercido el derecho de tanteo y retracto, mientras que otros 46 están en trámite.

Tras insistir en que han logrado incorporar en lo que va de mandato 455 pisos al parque de vivienda pública, Colau ha señalado que "no es suficiente", y ha pedido al Gobierno central y a la Generalitat que impulsen un cambio legislativo para evitar que aumente el precio del alquiler privado, que dificulta el acceso a la vivienda y que puede provocar una nueva burbuja inmobiliaria, ha dicho.