Los restos de sangre encontrados en la habitación de la que desapareció Madeleine McCann no pertenecían a la niña, según publica el diario británico The Times.

Sin embargo, la Policía portuguesa ha informado que todavía está esperando los resultados de los análisis.

El rotativo publica este jueves que los análisis realizados en el Servicio Forense británico, en Birmingham, muestran que probablemente la sangre pertenece a un hombre blanco del "subgrupo del noreste de Europa".

Sin embargo, esta conclusión tiene sólo un 72% de fiabilidad debido a las malas condiciones de la muestra dada su antigüedad y a que la pared donde se encontró había sido limpiada con detergente.

El Servicio Forense está llevando a cabo nuevas pruebas de los restos.

Alimentaría las esperanzas

De ser cierta, esta información sería un pequeño alivio para Kate y Gerry McCann, quienes ya habían señalado que continuarán creyendo que su hija está viva mientras la Policía no diga lo contrario con pruebas irrefutables.

Las restos de las manchas de sangre detectadas por los perros rastreadores hace dos semanas en el apartamento que los McCann tenían alquilado en el Algarve portugués fueron enviados a un laboratorio del Servicio Forense británico.

El informe de cuatro páginas de los resultados de las pruebas concluyen que la sangre no es de Madeleine, indica el rotativo.

Los investigadores ya sospechaban que la sangre pertenecía a un hombre que había resultado herido mientras estuvo en la habitación del apartamento después de que Madeleine despareciera.

Esta circunstancia, según The Times, explicaría por qué la sangre no fue descubierta cuando la Policía portuguesa examinó el cuarto en las primeras semanas.