Aunque Rosario Flores siempre ha presumido de barriguita en la playa cuando ha estado embarazada, y ha sido de las primeras premamás en ponerse bikini, en esta ocasión se baña con una camiseta. No será por miedo a lucir michelines. La cantante, a sus cuarenta y cuatro años, ha heredado la figura fibrosa de su madre, Lola Flores.

La cantante está tan ocupada cuidando a su pequeño Pedro Antonio, que a penas tiene tiempo para ella. El niño ya anda solito y, a juzgar por las imágenes le encanta la arena y el agua del mar.

Correteó por la orilla, se bañó con su mamá, se mostró revoltoso y demostró que en sus venas corre la sangre inquieta de los flores.

Rosario estuvo pendiente de él en todo momento y se volcó en su rol de mamá, y es que a pesar de que ya ha pasado la barrera de los cuarenta, es ahora cuando descubrirá lo que es llevar las riendas de una familia numerosa.

Desde que Rosario contrajo matrimonio con Pedro Lazaga la artista está radiante y feliz, tanto que este último embarazo le ha cogido por sorpresa.