«Me casé porque quería estar con él y, ahora, cada uno estamos en una punta del planeta. No creo que sea justo hacernos pasar por este duro trance». Este es el testimonio que comparten dos valencianas, Cynthia y Sonia. Se casaron hace dos años en la República Dominicana , y ninguna puede estar con su marido.

Interrogatorio del amor

¿Cuál es la banda sonora favorita de tu marido o cuántas veces se lava los dientes a lo largo del día? Estas y otras muchas preguntas parecidas son las que se formulan en la embajada para tratar de averiguar si los matrimonios son por verdadero amor o por conveniencia.

Sonia y Cynthia se sometieron al interrogatorio, cuando hace poco más de dos años encontraron a sus medias naranjas en la República Dominicana y decidieron casarse.

En ambos casos, la embajada concluyó que había una falta de convivencia en las dos parejas y que, por lo tanto, los matrimonios no se podían validar.

Además del perjuicio emocional, Cynthia y Sonia están afrontando un gran gasto: «Estoy endeudada hasta las cejas, me he tenido que trasladar a Tarragona para poder conseguir ahorrar más dinero y mandarle una ayuda a mi marido. Allí necesitan muchas cosas», explica Cynthia.

"Sin trabajo no entran en España"

Cynthia y Sonia están investigando hasta la más remota posibilidad para que sus maridos puedan venir a vivir a España. En la República Dominicana, la embajada no les concede el visado y, por lo tanto, no pueden entrar en España ni como turistas. Desde el despacho del abogado Francisco Salan explican: «El visado es muy probable que no se lo den, porque ya los tienen fichados en la embajada». La única manera que tienen para poder llegar a España «sería con un contrato de trabajo, sin él, no les dejarán entrar», comenta este experto.