La Junta pretende reducir en un 30% la mortalidad por infarto en Burgos a través del proyecto BUSCA

La Junta de Castilla y León pretende reducir en un 30 por ciento la mortalidad por infarto en Burgos a través del proyecto BUSCA, según ha señalado este martes en la capital burgalesa el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado.
Sáez Aguado, en su comparecencia en Burgos.
Sáez Aguado, en su comparecencia en Burgos.
EUROPA PRESS
Sáez Aguado, en su comparecencia en Burgos.

La Junta de Castilla y León pretende reducir en un 30 por ciento la mortalidad por infarto en Burgos a través del proyecto BUSCA, según ha señalado este martes en la capital burgalesa el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado.

Durante la presentación en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) de la adaptación y mejora del programa Código Infarto, Antonio María Sáez Aguado ha explicado que el objetivo último de esta iniciativa es disminuir las muertes causadas por infarto en un 30 por ciento y los reingresos originados por esta enfermedad hasta un 50 por ciento.

El proyecto BUSCA, presentado por el jefe de la Sección de Medicina Intensiva del HUBU, José María Ayuela Azcárate, es una adaptación específica a la realidad burgalesa del programa Código Infarto, que contempla la tarea de cada uno de los actores en la atención al infarto agudo, los criterios diagnósticos y la actuación terapéutica de los profesionales de Atención Primaria, emergencias, servicios de urgencia hospitalarios y de la Unidad de Homodinámica.

En concreto, supone la coordinación de los profesionales de los centros de salud de Burgos, de cuatro UVI móviles, 17 unidades de soporte vital básico y de los diferentes servicios hospitalarios implicados.

En julio de 2014, se puso en marcha en Castilla y León la Estrategia de Reperfusión del Infarto Agudo de Miocardio, conocida como Código Infarto, mediante la cual se ha creado un marco de actuación con el fin de organizar una red asistencial que, optimizando los recursos sanitarios disponibles, sirva para mejorar la atención del paciente.

Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en Castilla y León se produjeron 1.138 defunciones causadas por infarto agudo de miocardio en 2013, lo que supone un 4,1 por ciento del total de muertes.

La tasa de mortalidad en pacientes con este diagnóstico durante el primer mes de esa anualidad fue del 50 por ciento y casi la mitad de ellas ocurrieron durante las primeras dos horas, antes de que el paciente pudiera llegar al hospital.

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