La carrera para organizar la 33 Copa del América podría iniciarse hoy mismo si el Alinghi se adjudica la séptima regata (van 4-2 y gana el primero que llegue a 5).

A estas alturas, lo único que ha confirmado el Alinghi es que se celebrará en una ciudad europea. De esta forma, quedan descartadas las propuestas de varios países árabes que se habían interesado.

Además, varios factores hacen presagiar que Valencia será la elegida. Por un lado, el tiempo juega a favor, ya que las primeras regatas se celebrarían en dos años y es difícil dotar a un puerto de la infraestructura necesaria. Así lo ha explicado el miembro del comisionado del Consistorio para la Copa del América,

José María Gil Suay: «Valencia tiene una oferta muy buena y los suizos ya la conocen... Estamos en una buena situación».

Otra pista significativa es la anunciada constitución del Club Náutico Español, con sede en la base del Desafío Español, lo que supone dejar sin opciones a otras ciudades españolas. Este nuevo club será, salvo sorpresa, el primer desafiante del ganador de la actual Copa, lo que le da derecho a pactar fechas y lugares.

También será determinante el canon que el Alinghi pida para acoger el evento: Valencia pagó 90 millones para albergar esta edición y se impuso a las candidaturas de Nápoles, Marsella y Lisboa.

El puerto de la Copa del América batió el domingo su récord de visitantes en un día, al pasar por sus instalaciones 87.547 personas. Así, superó las más de 82.000 que se acercaron un día antes. Ese mismo sábado, el Ejército del Aire se empleó a fondo para interceptar un helicóptero que sobrevolaba sin autorización el espacio aéreo restringido de la Copa del América. El subdelegado del Gobierno en Valencia, Luis Felipe Martínez, afirmó ayer que la aeronave entró «por un descuido».