El conselleiro de Economía e Industria, Javier Guerra, ha presidido este miércoles la constitución formal de la comisión de valoración encargada del análisis de los proyectos presentados por las empresas al amparo de la orden de convocatoria pública de 2.325 nuevos megavatios eólicos. Tendrá un plazo máximo de cuatro meses para resolver las solicitudes presentadas.

El primer cometido que tendrá la comisión de valoración, tras cerrar un calendario de reuniones, será revisar la documentación presentada por los solicitantes por si es necesario "subsanar algún error", para pasar a estudiar después la acreditación de la capacidad legal, técnica y económica de las empresas. Superados estos trámites, se entrará en la valoración de los proyectos eólicos e industriales.

Guerra ha destacado que el proceso está siendo "impecable", convencido de que los resultados "son un éxito" puesto que los 90 solicitantes contabilizados hasta el momento —que suman una potencia que "multiplica por siete la oferta de la convocatoria"— concurren pese a las dificultades para acceder a financiación, la situación de inseguridad tarifaria "provocada por el Gobiernos" y los "filtros" de la propia orden para garantizar la "solvencia" de las firmas.

A su juicio, el "éxito" del concurso reside en la "transparencia" del proceso, en la "seguridad jurídica" que otorga la orden que regirá la convocatoria y en la "garantía" de impulsar el desarrollo socioeconómico de Galicia. Además, Guerra ha señalado que la orden "evita la especulación" con el objetivo final de beneficiar a todos los gallegos.

En este contexto, la Xunta considera que esta convocatoria refleja "el compromiso" del Gobierno de Feijóo con el sector y resalta que está "directamente vinculada" con la aprobación de la nueva Ley de Aprovechamiento Eólico de Galicia, por la que ya se han ingresado más de 22 millones de euros de la mano del canon eólico.