El Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) acoge la primera gran muestra monográfica dedicada al fotógrafo catalán Gabriel Casas (1892-1973), una selección de 120 imágenes del periodo 1929-1939 que muestra la "singularidad" del autor, vinculado con las vanguardias internacionales y pionero de la corriente de la Nueva Visión.

La muestra podrá verse desde el miércoles y hasta el 30 de agosto —posteriormente recalará en Girona y Tarragona—, y quiere poner en valor "uno de los fotógrafos más importantes del periodo de entreguerras", al que se habían dedicado solo pequeñas muestras, ha valorado el comisario, Juan Naranjo, este martes en rueda de prensa.

Gabriel Casas. Fotografía, información y modernidad, 1929-1939 es una colaboración del MNAC con el Arxiu Nacional d'Art de Catalunya —que cuenta con 20.000 instantáneas de Casas en su fondo—, la Obra Social La Caixa y la hija del fotógrafo, Núria Casas.

Casas "contribuyó a la renovación de la forma de informar con imágenes", teniendo en cuenta aspectos sociales y psicológicos además de estéticos, y experimentó con elementos del diseño gráfico y la publicidad, así como los propios de la Nueva Visión —fotomontajes, puntos de vista inusuales, abstracción y repetición de elementos, entre otros—, han destacado.

La exposición refleja sus intereses a través de cuatro apartados, que se inician con Nueva Visión y siguen con Registros, que muestra 1la apuesta de Casas para que la fotografía "adquiriera protagonismo propio, pasando de ser ilustración a creación".

El apartado de Fotografía Social demuestra la repercusión mediática de un momento de crisis social y analfabetismo en España, mientras que Retratos expone cómo Casas se adentró en la fotografía cándida para realizar "retratos de personalidades sin posar, reflejando sus aspectos psicológicos", como es el caso de una fotografía de un juguetón Buster Keaton.

El comisario ha señalado la Exposición Internacional de Barcelona de 1929 como uno de los momentos en los que el fotógrafo obtuvo protagonismo, en una época en la que el arte vanguardista tenía gran difusión en la sociedad catalana, y ha añadido que el autor se reflejó en el carácter crítico y joven de los bohemios del siglo XIX.

"Al terminar la Guerra Civil, el fotógrafo fue represaliado y no pudo volver a trabajar para prensa, siendo limitado a fotografía industrial y publicitaria", ha destacado Naranjo.

El director del Arxiu Nacional, Josep Maria Sans Travé, ha explicado que la recuperación de las fotografías de Casas se inició en 1994, cuando estaban en manos del escultor Robert Llimós, negociando conjuntamente con la hija del fotógrafo, con la que el archivo se comprometió a poner en conocimiento del público general al autor.