Dicen los números del Instituto Nacional de Estadística (INE) que 2014 acabó con una subida del 1,8% en los precios de la vivienda libre respecto a 2013. Ese dato supone el primer repunte de los precios tras seis años de caídas anuales consecutivas. Con este indicador y aquel otro del crecimiento de las ventas, muchos análisis dan por superada la crisis inmobiliaria.
Pero no a todos les parece así. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) considera que aquellos que “dan por superada la burbuja inmobiliaria” lo hacen “aferrándose a indicadores que no analizan en profundidad”. Considera la OCU que “la realidad es que, a medio plazo, la tendencia de los precios seguirá a la baja”.
Una de las razones que aduce esta organización es que en España el 85% de las viviendas están sobrevaloradas. La OCU hace un seguimiento de los precios inmobiliarios por zonas –con datos de 51 ciudades, que en 4 de ellas (Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla) se desglosan en más de 300 barrios–.
Según ellos, pese a las bajadas acumuladas de precios, pese a algunos "brotes verdes" y “pese a una gran cantidad de titulares optimistas”, sólo el 7% de todo lo que ha entrado en su comparador recibe el consejo de "comprar" y un 85% del parque de viviendas está sobrevalorado, por lo que se recomienda vender.
Según la OCU, el empeño de que los precios de la vivienda volverán a subir –ya están subiendo en algunas ciudades– “quizás sea un torpe intento de animar a los compradores o tal vez es solo una mala comprensión de los datos”. Consideran que es muy pronto para hablar de cambio de tendencia a las luz de cuatro variables:
- El dato dice que en 2014 se vendieron más viviendas que en 2013 (un 19% más según el Notariado). Esto es lo que reflejan muchos medios de comunicación. Lo que según la OCU no dicen es que la mayoría de estas ventas (un 62%) fueron sin hipoteca. Se pagaron con ahorros o con lo que se ganó mediante otras ventas.
- El dato dice que en 2014 se construyeron más viviendas, llegándose a los 35.000 visados para nuevas obras. Lo que nadie comenta, dice esta organización, es que estamos aún en cifras mínimas: esos 35.000 visados suponen apenas el 7% de los que se concedieron en el año 2000. Más allá de los titulares de prensa, la prudencia de los constructores resulta evidente.
- El dato dice que, en febrero de 2015, había 300.000 parados menos que un año atrás y 460.000 cotizantes más a la Seguridad Social. Pero en enero de 2015 sólo un 9% de los nuevos contratos fueron indefinidos (frente a un tercio de contratos a jornada parcial). Es verdad que hay más personas trabajando, según la OCU, pero son demasiados los que no cuentan con un horizonte estable que les anime a comprar vivienda.
- El dato dice que sube el consumo de cemento (+0,1%). Pero no olvidemos que estamos en año electoral = las licitaciones oficiales de obras se han disparado un 33%.
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