Si desde un principio El francotirador fue una película que suscitó críticas por su elevado tono patriótico —comparado incluso con la "propaganda nazi"—, ahora se ha sumado otro debate por la utilización en una de las escenas más emotivas del filme de Clint Eastwood de un bebé de plástico y no uno de verdad.

En esta escena, los actores Bradley Cooper y Sienna Miller (Chris y Tara Kyle en la ficción) mantienen una conversación mientras sostienen en sus brazos a un bebé que ni se inmuta, pero cuyo llanto no deja de escucharse, provocando la burla y los comentarios de espectadores y críticos.

¿Cuál es el motivo de que utilicen un muñeco en vez de una persona? El guionista de la película Jason Hall escribió lo siguiente en un mensaje en Twitter, que después borró: "Odio arruinaros la diversión, pero el bebé real número 1 se presentó con fiebre. El bebé real número 2 no apareció. (Voz de Clint) 'dame un muñeco, chico", resumió Hall.

La web Vulture ha recopilado algunas de las críticas que ha recibido la película por este motivo. Entre ellas está la del portal Hitfix, que aseguraba: "Es demasiado obvio, y ninguno de ellos (los actores) parece cómodo sosteniéndolo. El peso está mal y se ve por la forma en que intentan cogerle en brazos. En concreto, Cooper parece que nunca ha sujetado a un bebé".

Camilla Long, en su crítica de The Sunday Times aseguraba que "nunca había visto tantos bebés terriblemente falsos en una película".

"Se ve claramente que (el bebé) se tambalea en lugar de moverse, lo que hace que los efectos de sonido del llanto se aprecien por separado de una manera muy inquietante", describió por su parte The Telegraph.