El presidente de EEUU, George W. Bush, dejó de piedra a Joann Falletta cuando la reemplazó frente a la orquesta que dirigía durante la conmemoración del cuarto centenario de la fundación de la primera colonia británica en Virginia.

Falletta, que en un principio no se había dado cuenta de que tenía a Bush a sus espaldas, cedió a éste la batuta durante unos minutos tras percatarse de su presencia.

Bush condujo a la orquesta durante parte de la marcha patriótica "The Stars and Stripes Forever".

La orquesta estaba integrada por alrededor de 50 miembros de la Orquesta Sinfónica de Virginia y músicos de otras partes del país, algunos de los cuales confesaron haberse quedado impresionados al ver que Falletta cedía la batuta a Bush.

El inquilino de la Casa Blanca participó en los actos conmemorativos de la fundación de Jamestown (Virginia), el primer asentamiento británico permanente en EEUU.

Bush celebró, durante un discurso ante varios miles de personas, el legado democrático de Jamestown.

"Sabemos por nuestra historia que el camino hacia la democracia es largo y difícil", señaló, a lo que añadió que "tenemos confianza en el resultado porque hemos visto el poder de la libertad para transformar las sociedades".