El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha comparecido este viernes ante los medios de comunicación tras el último Consejo de Ministros del año para hacer balance político y económico del año 2014. "Estas son las primeras Navidades de la recuperación", ha asegurado Rajoy, que ha calificado 2014 como el "año de la recuperación" y el año 2015 como "el año del despegue de nuestra economía".

"Hace un año les pronostiqué un 2014 mejor y eso se ha cumplido con creces", ha dicho el presidente en el Palacio de la Moncloa. "El año que viene habrá menos parados y más personas cotizando, dije hace 12 meses. Eso se ha cumplido y el 2015 será mejor que 2014". Rajoy ha recordado que en 2014 se han creado 550.000 puestos de trabajo y, a falta aún de los datos de diciembre, se han incrementado en 338.000 personas el número de afiliados a la Seguridad Social.

El líder del Ejecutivo ha puesto como ejemplo de recuperación que España, según el presidente, "ha ganado competitividad gracias a las reformas" y ha detacado el mayor dinamismo de las empresas españolas en el exterior. "Solo nos supera Alemania en capacidad exportadora", ha asegurado.

"España crece más que la mayoría de nuestros socios en Europa y creamos más empleo que ellos, es una realidad que no se puede negar", ha puntualizado Rajoy. "Nunca hemos caído en el triunfalismo y desde esa prudencia puedo decir que España crece con bases sólidas y si las condiciones favorables se mantienen, 2015 puede ser un año muy bueno para nuestra economía".

Rajoy también ha sido preguntado durante la rueda de prensa por dos casos de corrupción, Gürtel y Noos, donde están implicadas dos personas —la infanta Cristina y la exministra de Sanidad Ana Mato— cuya inocencia fue defendida por el presidente. "¿Sigue creyendo en la inocencia de la Infanta? ¿Y en Ana Mato?", ha preguntado una periodista. La respuesta de Rajoy: "La segunda pregunta ya lo expliqué, y la primera... soy presidente del Gobierno y no debo entrar en esos temas".

El presidente había expresado en junio su "deseo" pero también su convencimiento de que la infanta Cristina (recientemente procesada por el juez Castro por "presunta colaboradora" en dos delitos fiscales) demostraría su inocencia en el caso Nóos. "Ese es mi deseo y mi convicción", dijo el presidente tras participar en una reunión del Consejo Europeo.

En el caso de Mato, Rajoy había expresado en octubre su total respaldo a la ya exministra de Sanidad al contestar con un "por supuesto" a la pregunta de los periodistas de si seguía manteniendo su confianza en ella. "Si no la apoyara, evidentemente no sería la ministra de Sanidad, como ocurre con todos y cada uno de los miembros de mi Gobierno", recalcó entonces. Mato ha sido señalada por el juez Ruz como "beneficiaria a título lucrativo" de la trama Gürtel y poco después abandonó su cartera ministerial.

"La acumulación de escándalos de corrupción causa alarma social, quiebra la confianza de los ciudadanos en sus representes y extiende una sombra de sospecha sobre todos los políticos", ha afirmado Rajoy, que ha destacado la creación del Portal de la Transparencia o la Ley de Enjuciamiento Criminal como dos de las medidas tomadas por su Ejecutivo como "respuesta integral y ambiciosa" a este fenómeno.

Rajoy también ha realizado una mención expresa al debate soberanista en Cataluña, con un mensaje directo al president catalán Artur Mas. "Lamento que algunos hayan abandonado la prioridad de cualquier gobernante, que es solucionar problemas en vez de crearlos y atender al bienestar de las personas". "El Gobierno de España", según Rajoy; "va a seguir velando por los intereses de los ciudadanos de Cataluña, apoyando a sus empresas y desde luego propiciando la concordia y el entendimiento entre catalanes".

También la aparición de nuevos partidos políticos ha tenido un hueco en su discurso. Rajoy, sin mencionar el auge en las encuestas de Podemos, ha resaltado la "estabilidad politica e institucional" que, según el presidente, "da seguridad a las personas, a las empresas y delimita el ámbito de las discrepancias entre las formaciones políticas". Rajoy ha alertado de un "retroceso" y una "falta de progreso" si se acabase con una estabilidad que, dice el líder del PP, ha proporcionado la alternancia de su partido con el PSOE durante todos los años de democracia.

Y finalmente se ha referido a una posible reforma de la Constitución, una iniciativa ante la que no se ah querido poner a la vanguardia. "Yo estoy abierto a todo. Decir que un Gobierno no quiere reformar con todas las reformas que hemos hechos, reestructuración energética, de la administración, educación, unidad de mercado... Pero yo no la voy a plantear porque no la veo clara".