Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado día 24 en Santiago de Compostela a dos individuos por un delito de usurpación del estado civil, por dos faltas de hurto y una de estafa. Les atribuyen a los individuos la sustracción de carteras por toda Galicia y el uso de documentación ajena para obtener dinero y efectos.

Según ha informado la Policía, estos hechos se producían desde el año 2011 en varias localidades gallegas. La pareja se dedicaba a sustraer carteras en sitios públicos, como gimnasios, líneas de tren de cercanías o lugares muy concurridos, y con ellas, aparte del beneficio económico por el dinero en efectivo, usaban la documentaciones y sus tarjetas para financiarse.

La pareja se apropiaba de la identidad de sus víctimas y construía "una vida paralela", según relata la Policía, con la contratación de cuentas bancarias, contratos de telefonía y microcréditos, así como también la estancia en hoteles y el alquiler de vehículos.

Con estas actuaciones conseguían que los denunciantes, aparte de la pérdida económica, se convirtieran en "víctimas de un maltrato en su integridad", según resalta la Policía, por ser identificados en "multitud de hechos delictivos" como presuntos autores de esos delitos.

En junio de este año, en la localidad de Marín (Pontevedra), el detenido se hizo pasar por otra persona usando su documentación para alojarse en hoteles, adquirir créditos y líneas de teléfono. En ocasiones estaba acompañado de su pareja sentimental, que también usaba la identidad de otra persona con la documentación sustraída en Gondomar.

Modo de vida

En octubre de este año, acudieron a un gimnasio de Santiago para realizar la preinscripción facilitando la identidad de una de sus víctimas de hurto y la intención de la pareja, según el relato policial, "no era otra que la de sustraer más documentaciones con el fin de continuar con sus carreras delictivas, según demuestran los antecedentes que poseen, que en el caso del hombre, poseía más de veinte reseñas". Tras su detención, llegaron a afirmar ante los agentes que era su modo de vida.

Con las documentaciones sustraídas financiaban artículos en diversos establecimientos comerciales y solicitaban préstamos en distintas entidades de concesión de créditos rápidos. También llegaron a sacar unos 3.000 euros en efectivo en el interior de las sucursales bancarias.

Tras una "compleja investigación", según destaca la Policía, y relación de los hechos similares ocurridos por toda la geografía gallega, el hombre de 39 años y la mujer de 19 han sido detenidos por agentes en Compostela. Vigo,

Pontevedra, Marín, Gondomar y Santiago son algunas de las localidades en las que actuó esta pareja de delincuentes. En su detención, la Policía les intervino diversa documentación a nombre de varias personas, varias tarjetas bancarias de las víctimas, así como numerosos recibos de diferentes sucursales.

Los dos detenidos han quedado en libertad con cargos tras pasar el miércoles a disposición judicial, según han precisado las mismas fuentes policiales.