El plan de bilingüismo empezó a implantarse en la comunidad autónoma andaluza en 2005. Este curso, casi una década después, ya está implantado en un total de 1.184 centros educativos de la región y beneficia a 272.297 alumnos.

Sin embargo, esta última cifra solo representa a casi el 19% (el 18,7% más concretamente) de los 1.454.134 de estudiantes que hay este curso en Infantil, Primaria, Educación Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato o ciclos de Formación Profesional (FP).

Pero es que si se compara el dato con la cifra total de matriculados en etapas educativas no universitarias de la región (1.880.146), supone aún menos: un 14,5%.

Para la Federación de Enseñanza de CC OO-A, este programa llega únicamente "a una minoría". Y, además, señala otro problema: No todas las líneas (grupos) de los centros donde se imparte el plan son bilingües. Es decir, que hay colegios e institutos con cuatro grupos y solo uno o dos son bilingües.

CC OO-A y CSIF-A aseguran que esta situación provoca "discriminación" entre el alumnado y las familias andaluzas.

De hecho, asociaciones de padres y madres de alumnos han criticado este mismo hecho en más de una ocasión en estos nueve años.

Asimismo, CC OO-A apunta que el plan de bilingüismo es "un programa bastante complejo", que solo se aplica en ciertas asignaturas y que requiere de ayudantes de conversación que apoyen a los profesores, aparte de una buena formación del equipo docente.

Maestros y profesores "ponen voluntad, pero es necesario un esfuerzo de la Administración para formarlos", añade. Según CSIF-A, "no se ha hecho una correcta planificación para formar al profesorado andaluz".

La organización, incluso, asegura que "en la mayoría de casos, la formación ha corrido a cuenta del bolsillo de los docentes". También señala que el ritmo de implantación del plan es "lento" para las "necesidades actuales que hay». En este sentido, recuerda que "no conocer a fondo un segundo idioma te condiciona para conseguir un trabajo".