La investigación, realizada por científicos de la Universidad de Michigan (EEUU), ha sido presentada este lunes en la Conferencia de Biología Experimental 2007 en Washington.

Según la investigación, las ratas que consumieron guindas ácidas en polvo también bajaron el estrés por oxidación y aumentaron la producción de una molécula que ayuda al organismo a administrar las grasas y el azúcar, en relación a las ratas que no recibieron guindas como parte de una dieta idéntica.

Todas las ratas tenían predisposición hacia un colesterol alto y diabetes, pero no obesidad, según un comunicado divulgado por la Universidad de Michigan.

Los dos grupos de animales tenían características que se vinculan al síndrome metabólico, un grupo de factores de riesgo relacionado a una mayor posibilidad para desarrollar enfermedades cardiacas y Diabetes del Tipo 2. Decenas de millones de estadounidenses padecen del síndrome metabólico, según la Universidad de Michigan.

No probado en seres humanos

Se desconoce si las dietas ricas en guindas tendrían un efecto similar en los seres humanos, aunque la Universidad de Michigan planea realizar en breve una pequeña prueba clínica para evaluarlo.

"Esta información se une a otros resultados que sugieren una correlación entre el consumo de anthocyanin (un antioxidante presente en las guindas ácidas) y una reducción de los riesgos cardiovasculares y metabólicos", afirmó en el comunicado Steven Bolling, que realizó el estudio junto con E. Mitchell Seymour, principal autor de la investigación.

Los científicos utilizaron para su prueba 48 ratas Dahl, que tienden a tener la presión sanguínea alta vinculada al consumo de sal, altos niveles de colesterol y problemas de tolerancia a la glucosa.

Las guindas ácidas del tipo Montmorency son una variedad de guinda que crece sobre todo en el norte de Michigan, el mayor productor de EEUU, y en Austria y Alemania, donde se utilizan fundamentalmente para repostería.