La directora del Servicio Secreto de Estados Unidos, Julia Pierson, ha presentado su dimisión a raíz de los últimos errores en la vigilancia del presidente y la Casa Blanca, ha informado este miércoles el secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson. El secretario ya ha anunciado el nombramiento de Joseph Clancy, un veterano de la agencia, como nuevo director en funciones del Servicio Secreto.

Pierson, deja así el cargo apenas 18 meses después de acceder al mismo. Fue nombrada para el puesto después de que se revelase que algunos agentes habían subido a prostitutas a las habitaciones del hotel donde acompañaban al presidente del país, Barack Obama, en un viaje a Colombia en 2012.

El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, ha dicho que Obama ha llamado a Pierson para agradecerle los años en servicio. No obstante, el propio presidente admitía que hacía falta una revisión tras los últimos errores, según Earnest.

El pasado 19 de septiembre, un hombre logró saltar la valla de la Casa Blanca y entró con un cuchillo a la mansión ejecutiva. Pierson pidió públicamente perdón por un error que consideraba "inaceptable" y prometió que trabajaría para que no volviesen a ocurrir incidentes de este tipo.

La presión sobre el Servicio Secreto aumentó este martes, cuando se conoció que el 16 de septiembre un guardia de seguridad armado y con antecedentes penales había compartido ascensor con Obama.

En un principio, el Servicio Secreto dijo que solo había accedido a la entrada del Pórtico Norte y que iba desarmado, pero después se supo que González iba armado con un cuchillo, tenía en su coche 800 cartuchos de munición y había atravesado la Sala Este, donde el presidente, que no estaba en el edificio, celebra habitualmente actos de trabajo.