El ilustrador santanderino José Ramón Sánchez ha sido galardonado este martes con el Premio Nacional de Ilustración correspondiente a 2014 por "su trayectoria, su influencia en varias generaciones de ilustradores y su esfuerzo por el reconocimiento de la profesión".

José Ramón Sánchez (Santander, 1936) comenzó en 1961 su actividad como cartelista publicitario y hacia 1970 empezó a ilustrar libros infantiles y didácticos. Entre otros trabajos, ilustró La Constitución del 78, destinada a los alumnos de E.G.B. por encargo del Ministerio de Educación.

A finales de los años 70 comenzó su colaboración en Televisión Española, en programas como Un globo, dos globos, tres globos, donde dibujaba en directo las historias que narraba la escritora Gloria Fuertes.

En 1979 realizó la serie de dibujos animados El desván de la fantasía que posteriormente llevó a la gran pantalla como un largometraje.

Su momento de mayor popularidad tuvo lugar en la década de los años 80, gracias a su participación en programas infantiles de TVE como Sabadabadá y posteriormente, El kiosko, donde mostraba su talento con el dibujo en directo con un rotulador negro.

Simultáneamente, entre 1980 y 1982, trabajó en La gran aventura del cine, una colección de 104 cuadros y 20 retratos de actores y actrices. Esta obra se ha expuesto en el Museo Español de Arte Contemporáneo. Su pasión por el cine volvió a quedar reflejada en la exposición 50 años de cine español a la que siguió Nijinsky y los grandes ballets rusos.

A principios de los noventa publica Retablo infantil, sobre la obra de Manuel Llano, y El Quijote. Desde ese momento se suceden trabajos de mayor envergadura, con publicaciones lujosas y de gran formato en las que alterna el óleo con el dibujo a lápiz de detalles.

Fruto de esta labor son los libros Monstruos, duendes y seres fantásticos de la mitología cántabra, La vuelta al cine en sesión continua y La Biblia contada a todas las gentes.

En 2000 puso en marcha su exposición Amores del cine, a la que siguió el proyecto Moby Dick, para el que creó la Editorial Valnera. En ella ha publicado sus últimas obras: El cine de los Escolapios, Gentes de Sotileza, El taller de los maestros, Los días del retablo, Diez judíos en La Casona, Miradas, Transiciones, Agenda 2008 y Beato del siglo XXI.

En 2008 culminó el proyecto de ponerle imágenes a las Guerras Cántabras en dos libros de gran formato: Cantabria: la epopeya I. Segisama y Cantabria: la epopeya II. Monte Vindio. En 2012 abordó de nuevo el campo de la ilustración infantil, con la publicación del libro Cuando el abuelo fue niño (Valnera).

El ilustrador santanderino José Ramón Sánchez ha recibido "con alegría" el Premio Nacional de Ilustración, y asegura que no espera más reconocimientos y que no va a llamar a sus amigos para decírselo porque le "da vergüenza". "Me da mucho corte", ha señalado.

De hecho, ha explicado que considera este premio "como un final de etapa" y como "si empezara a cerrar cuestiones", pero deja claro que seguirá trabajando con la misma ilusión.

Ahora quiere retomar su último proyecto, una edición sobre la Gran Depresión americana y la Guerra Civil, que sacará a final de año con Valnera.

Y es que su aspiración ahora es "seguir trabajando" y "dar gracias a Dios" por su vocación y su capacidad para dibujar, al margen de premios, distinciones y reconocimientos.

"Hoy acabo de cerrar la puerta como ilustrador dedicado a los niños mucho tiempo, a la gente joven y después a los adultos", ha apostillado este dibujante, que ha hablado con Efe en la estación de tren, recién llegado a Santander desde Madrid.

Cuando recibió la noticia estaba con uno de sus hijos, el director de cine Daniel Sánchez Arévalo, que fue quien recibió esa llamada en su teléfono, ya que su padre no tiene móvil.

"Mi hijo cuando ha visto que no era para él ha sido muy discreto y ha dicho: papá, es para ti", ha contado Sánchez, que ha añadido que, después de conocer la noticia, los dos se han abrazado y han llamado a otro de sus hijos, Ignacio, que es realizador de televisión y que "se ha vuelto como loco de contento".

Según indica, le queda avisar a su hija Paula, que vive en París, y a su hermana Julia, a las que piensa llamar porque no le gustaría que se enteraran por la prensa.

Afirma que "lo importante" es el "don". "Lo importante para mí no son los premios ni los triunfos, lo importante de una vida creativa es el don que tienes", ha dicho Sánchez, que ha dibujado "desde siempre", desde que tenía 5 años.

Y es que aún recuerda sus primeros dibujos, que hizo a esa edad, "de un barco, un vaquero y un pirata" a tinta china, con plumilla. Pero, si se le pregunta, dice que siempre se queda con lo último que ha hecho, en su caso la exposición sobre la Guerra Civil —Maldita guerra"— que se ha mostrado recientemente en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Santander.

El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte concede este galardón, dotado con 20.000 euros, con el objetivo de "reconocer y distinguir el conjunto de la labor realizada por un ilustrador español en el ámbito del libro y de las letras españolas".