En el acto de presentación del Informe Económico del Presidente del Gobierno 2007 (PDF), celebrado en la Bolsa, Zapatero señaló que en el primer trimestre la economía española ha crecido "en torno al 4 %", y recordó que el año pasado España aumentó su PIB por encima de todos los países del G-7 y se situó como octava economía mundial.

Tras reiterar que 2006 fue "el mejor año económico de la democracia", Zapatero aseguró que no quiere ser ni optimista ni autocomplaciente, y recordó que "aún" quedan "importantes desafíos" como la mejora de la competitividad y de la balanza con el exterior, así como la vigilancia de la inflación, retos que, apuntó "queremos afrontar con empresarios y trabajadores".

En sintonía con el FMI

La cifra avanzada por Zapatero parece concordar con la proporcionada hace solo unos días por el FMI, que cifraba el crecimiento español en un 3.6 % para este año, con una inflación (3,4 %) cuatro décimas menor a la obtenida en 2006.

¿Una política de izquierdas?

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, aseguró por su parte, en respuesta a las palabras de Zapatero, que la política económica del Gobierno socialista es "continuista" y "poco ambiciosa" en lo social y reclamó al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, una "agenda de izquierdas" y no de centro o de centro-derecha.

El líder de IU abogó por una política económica que apueste por la mejora de la calidad del empleo, las pensiones, los servicios sociales o el acceso a la vivienda.

"Sería mucho más interesante para hacer luz de gas a la estrategia de la derecha presentar una agenda de izquierda, no contraponer a la agenda de la derecha extrema una agenda de centro o del centro derecha", subrayó.