El banquero Emilio Botín, fallecido este miércoles en Madrid de un ataque al corazón, era una de las grandes fortunas españolas y uno de los tres empresarios del Ibex 35 de más edad. Llevaba 54 años en el consejo de administración de la entidad, 28 de ellos en la presidencia.

La lista actualizada de milmillonarios a nivel mundial de la publicación estadounidense -con un total de 1.655 entradas- no cuenta con la presencia de Emilio Botín a título individual; en 2012 sí estaba, con una fortuna estimada de 1.100 millones de dólares (850 millones de euros).

En la última edición de la lista, de marzo de 2014, consta su hermano Jaime, expresidente de Bankinter, hoy en el puesto 981 con 1.900 millones de dólares (1.469 millones de euros). Un total de 25 españoles, según Forbes, se sitúan por encima de los 1.000 millones de dólares. El primero es Amancio Ortega, con 63.000 millones de dólares (48.700 millones de euros). En el índice de milmillonarios de Bloomberg no hay referencia a Botín.

El diario El Mundo incluyó en diciembre de 2013 a la familia Botín en el octavo puesto de su ranking de las 100 mayores fortunas de la Bolsa. La cifra que dio era de 1.606,9 millones de euros en total, basada en datos recogidos de la CNMV y de las llamadas sicavs. En octubre de 2013, la familia controlaba un 0,7148% del capital social del Santander.

En 2013, Emilio Botín habría percibido en el Santander un salario anual bruto de 1,34 millones de euros -la misma cantidad presupuestada para 2014- y un bonus autorizado de 1,8 millones, sin contar otros conceptos variables o derivados de su condición de directivo de la entidad, según el informe de 2013 la comisión de nombramientos y retribuciones. Así, la remuneración total fue de 3,051 millones; también consta un saldo de 25 millones de euros en su plan de pensiones a 31 de diciembre de 2013.

En España, el número de individuos con grandes patrimonios se incrementó un 11,6% en 2013, hasta alcanzar las 161.400 personas, según un informe de la consultora Capgemini.