La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha anunciado que su partido presentará este mismo lunes en el Parlamento de Cataluña la petición de comisión de investigación sobre el caso Jordi Pujol y ha instado al presidente de la Generalitat a "dar la cara" ante este "patriotismo hipócrita", el "mayor engaño histórico y vergonzoso a la sociedad catalana".

Antes de participar en Madrid en al reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP presidido por Mariano Rajoy, ha insistido en sus críticas de que es "gravísimo" que Pujol haya estado "evadiendo impuestos durante 34 años" y ha subrayado que el PP desea una investigación de esa actitud "hasta las últimas consecuencias".

Tras lamentar que quien ha estado dando "lecciones de catalanidad" se sepa que ha estado actuando de esta forma, "estafando a los catalanes", ha subrayado que ahora se entiende por qué había tanta prisa en CiU para crear la Agencia Tributaria Catalana. "Después de ver que ha estado evadiendo impuestos y engañando a los catalanes durante 34 años, ahora muchos entendemos por qué tenían tanta prisa e interés en crearla", ha asegurado la dirigente popular a su llegada al Comité Ejecutivo Nacional del PP.

"Artur Mas tiene que dar la cara y no puede decir que es una cuestión privada y familiar. No puede mirar a otro lado", ha agregado. Preguntada por si el PP está exigiendo ahora actitudes que no ha tenido este partido ante casos de corrupción en sus filas, ha rechazado esa comparación pues entiende que Rajoy "dio la cara" y será la Justicia la que tendrá que e actuar respecto a lo que hicieron algunos que no están en el partido, ha señalado en referencia al 'caso Bárcenas'.

Frente a ello, ha subrayado que Pujol sigue siendo presidente fundador de Convergencia i Unió y esta formación debe pedir disculpas porque, con la actitud del expresidente de la Generalitat no se hace país, sino que ha practicado un "patriotismo hipócrita", ha dicho antes de entrar en la reunión, en la que también ha participado la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre. La popular ha dicho estar "anonadada" por el supuesto fraude y confía en que la sociedad catalana rechace este tipo de comportamientos, y no sólo el fraude, sino lo que ella cree que es peor, "la mentira".

Por su parte, el líder de C's, Albert Rivera, ha reclamado a CiU y ERC que apoyen la comparecencia del expresidente en el Parlament para dar explicaciones. En rueda de prensa, ha avanzado que C's está trabajando con los grupos del Parlament para poder convocar una Junta de Portavoces extraordinaria —necesita el apoyo de mínimo otro grupo— esta semana, en la que se debata la posibilidad de que el expresidente de la Generalitat comparezca cuanto antes en la Comisión de Asuntos Institucionales. "Se ha acabado el 'esto no toca', el 'contra Catalunya' y el 'España nos roba'; es la hora de la verdad", ha continuado.

"Queremos saber si los cuatro millones de euros del agujero del 'caso Banca Catalana' y los 30 millones del Palau de la Música están en las cuentas de Pujol", ha afirmado, y ha avanzado que apoyarán la creación de una comisión de investigación parlamentaria si el expresidente no da explicaciones en la Cámara catalana o éstas son insuficientes.  "Queremos saber si el 'capo' de la familia era Jordi Pujol y si nos han estado tomando el pelo durante 30 años envolviéndose en la 'senyera' para tapar los negocios de los Pujol y de todos su entorno".

Rivera ha vaticinado que la llave la tendrán CiU y ERC, ya que augura que el resto de grupos sí respaldarán esa iniciativa, por lo que ha pedido directamente la colaboración del presidente de la Generalitat y de CiU, Artur Mas, y del líder de ERC, Oriol Junqueras: "Espero que el 'todo por la patria' no tape la comparecencia por un delito fiscal".

Asimismo, ha exigido también a Jordi Pujol que renuncie a sus "privilegios" institucionales, en alusión a la pensión vitalicia que recibe, así como a la oficinas que corresponde por ley a los expresidentes de la Generalitat y que C's ya pidió eliminar —sin éxito— a través de una proposición de ley en el Parlament. "Es incompatible defraudar de esta forma con tener una pensión vitalicia y una oficina de expresidente", ha remarcado el líder de C's, que ha pedido a Mas que, si quiere desvincular a CDC de este caso, apoye las iniciativas impulsadas por los grupos de la oposición para tratar de aclarar lo sucedido.

Por su parte, el expresidente de la Generalitat y exlíder del PSC, José Montilla, ha reclamado a Pujol que dé más explicaciones sobre el supuesto fraude, que ha supuesto una "decepción" y que "hace daño al país y a la política en general, que ya no tiene mucho prestigio". "Ha sido un adversario político a lo largo de décadas pero siempre he tenido respeto hacia su figura y por el papel de la construcción de la Cataluña actual", ha admitido Montilla, quien ha animado a Pujol a "dar un paso adelante" y dejar el cargo de presidente fundador del partido.

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha instado a Mas y a su predecesor Jordi Pujol a "tomar la iniciativa", a dar explicaciones y a disipar cualquier sombra de duda sobre el dinero que tenía Pujol en paraísos fiscales. Los socialistas "utilizarán todos los medios" para que se sepa la verdad, pero ha dicho que antes, quiere dar una oportunidad a Mas, Pujol y a CDC a que actúen al respecto.

Iceta también ha pedido a Pujol que renuncie al tratamiento y a sus prerrogativas como expresidente de la Generalitat, y ha afirmado que las explicaciones que ha hecho hasta ahora son "del todo insuficientes" pues el fraude hace un gran daño "a la política, al catalanismo, a la Generalitat y a Cataluña" y ha destacado que la sociedad catalana sólo podrá recuperarse de este golpe sabiendo toda la verdad.

El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila (CiU), ha asegurado este lunes que el comportamiento de Pujol es "inadmisible y reprobable", especialmente por el carácter ético y moral que tenían sus discursos, que, según el conseller, muchas veces iban más allá de la política. En declaraciones a los medios, Vila ha explicado que el liderazgo del expresidente estaba "excesivamente idealizado", y ha instado a fijarse en los países nórdicos, con un perfil de líderes políticos más discretos.

El conseller ha asegurado que siente dolor por la noticia, que ha valorado como muy negativa para el ánimo colectivo y la confianza de Catalunya, y ha destacado que la primera lección de lo sucedido tiene que ser "no idealizar nunca demasiado un liderazgo".

Por su parte, el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell (CiU), ha afirmado haberse quedado "atónito y sorprendido" por la noticia, que ha supuesto un golpe para el Govern. "En unos momentos cruciales como estos en los que hemos recibido este golpe, es de vital importancia la posición de coherencia del Govern", ha explicado el econosmista, quien espera recibir más información al respecto en los próximos días.

Dada la importancia del caso, se ha remitido a la posición que adopte el presidente de la Generalitat. "En estos momentos es esencial, al ser un momento muy trascendental, adoptar una posición coherente de Govern", ha ahondado Mas-Colell, quien descarta que la revelación pueda dañar las negociaciones con el Estado. "No debe dañar nada. Me parece evidente. Hay siete millones de catalanes cuyo desarrollo depende de estas negociaciones con el Estado", ha dicho en alusión al nuevo sistema de financiación autonómico que debe abordarse en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de esta semana.