El concejal delegado de Salud de Lora del Río, Raúl García, y el jefe de Servicio de Aqualia en la localidad, Antonio Barba, han anunciado este lunes que se van a llevar a cabo mejoras para corregir la presencia de manganeso en el agua y tratar así "los últimos problemas de turbidez" detectados.

En rueda de prensa, García ha pedido disculpas a los vecinos por los "problemas de turbidez" que presenta el agua potable en las últimas fechas y, tras los últimos datos aportados por Aqualia, confirma que está afectando "al tres por ciento" de la viviendas de Lora del Río. "Estos problemas de turbidez ni siquiera son continuos, sino que la coloración y turbidez del agua se da durante unos diez minutos en momentos puntuales y después desaparece", añade.

Además, el concejal ha querido aclarar que todas las actuaciones que se van a realizar para solucionar este problema en ningún caso supondrán coste adicional para los vecinos de Lora, ya que su coste será soportado por Aqualia y el Ayuntamiento de Lora del Río.

Según García, se han puesto en marcha una serie de actuaciones para acabar y atajar el problema, para hacer una limpieza y análisis de las tuberías afectadas. Señala que el problema es la presencia de manganeso en el agua, "de ahí este tono oscuro del mismo, que se depositan en el fondo de las tuberías y ocasionan la turbidez".

Asimismo, se va a proceder a la modernización de la planta que está obsoleta en determinados aspectos, aunque deja claro que "el agua es apta para el consumo, tal como indican los análisis que se realizan continuamente del agua de Lora del Río".

Lo primero que han querido dejar claro para tranquilizar a todos los vecinos es que el agua es perfectamente potable y apta para el consumo, lo cual "se demuestra gracias a los múltiples análisis realizados, tanto en la red de abastecimiento como en la salida de la planta de tratamiento de agua potable del municipio". "Todos los resultados han sido satisfactorios y cumplen los parámetros legalmente establecidos por Sanidad", insiste.

Explica que este problema "viene de antiguo" y está provocado por los sedimentos de manganeso que se encuentran en la pared de tuberías antiguas que debido a cambios de velocidad en el flujo del agua se desprenden y hacen que el agua se coloree.

Actualmente, cada vez que un vecino da aviso de que en su casa tiene este problema, se va configurando un mapa para delimitar la zona afectada. Un trabajador de Aqualia acude al domicilio afectado y toma muestra del agua, y se realiza una purga de la red de abastecimiento, es decir, se enjuaga la tubería hasta que el agua sale en condiciones óptimas.

"Pero esta solución es solo a corto plazo, por lo que el Ayuntamiento y la empresa concesionaria van a realizar una serie de actuaciones que pretenden atajar por completo el problema", explica el Ayuntamiento loreño en un comunicado.

Entre las actuaciones se encuentra revisar el interior de las tuberías con una cámara para poder ver y examinar los sedimentos que existen en ellas. Esta inspección se realizará con una cámara que puede trabajar con la tubería en servicio, de manera que no sea necesario cortar el agua mientras dure la inspección.

También, se hará una purga generalizada de la red, para eliminar los posibles arrastres; una limpieza del interior de las tuberías mediante una máquina especial y agua a presión, y comprobar si así se eliminan las incrustaciones que se depositaron en ellas muchos años atrás; además de dotar a la planta de tratamiento de agua potable (ETAP) de los equipos e instrumentos modernos necesarios para que la instalación pueda reaccionar de forma automática ante cualquier incidencia que ocurra con el agua del embalse, o de la propia instalación.

Igualmente, se dotará a la instalación de captación de agua del pantano de los equipos necesarios para poder medir de forma continua el contenido en manganeso del agua captada, de manera que se pueda optimizar el funcionamiento de la planta potabilizadora en función del agua que le va a llegar del embalse.

Por su parte, Antonio Barba ha reiterado que en "ningún caso" el agua es perjudicial para la salud, ya que la cantidad de manganeso que contiene es "muy pequeña". Añade que la legislación sanitaria marca un máximo permitido de 50 microgramos/litro y el agua de Lora "no suele superar los 30 microgramos/litro".

Todos estos trabajos que se van a poner en marcha requerirán de unos meses para tener su efecto en las tuberías, por lo que tanto el concejal como el jefe de servicio de Aqualia han pedido paciencia y comprensión a los vecinos de Lora, a los que piden que den aviso enseguida si detectan este color anómalo en el agua de sus casas. Para ello, ponen a disposición de los vecinos los teléfonos de Aqualia -902 13 60 13 y 911 77 91 26- y del propio Ayuntamiento -955 80 20 25-.