Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea han condenado este lunes "las acciones promovidas por individuos armados en ciudades del este de Ucrania" y han acordado "la ampliación de la lista" de los individuos a los que ya se aplica la congelación de activos y prohibición de visados en respuesta.

Los Veintiocho han evitado acusar explícitamente a Rusia de estar detrás de las nuevas acciones violentas en ciudades del este de Ucrania pero han insistido en que "estos intentos de desestabilizar a Ucrania deben llegar a su fin", al tiempo que han apelado a todas las partes al diálogo para alcanzar una solución pacífica.

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha evitado avanzar a cuánta gente afectará la ampliación de las sanciones individuales porque están todavía "en fase de articular la lista".

Los Veintiocho han vuelto a amenazar además a Rusia con sanciones económicas si da más pasos para desestabilizar a Ucrania. "El Consejo recuerda que cualquier paso por la Federación Rusa para desestabilizar la situación en Ucrania llevaría a consecuencias adicionales y de amplio alcance para las relaciones en un amplio abanico de áreas económicas", han recalcado en el texto de conclusiones pactado.

El ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius, ha avanzado la posibilidad de que se celebre una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE la próxima semana para adoptar nuevas sanciones contra Rusia.

Daniel Baer, embajador de Estados Unidos ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, señaló que se ha documentado la presencia de personas con armas de fabricación rusa y que se pueden obtener en ese país, así como con equipos que coinciden con los que usa el Ejército de Rusia. Baerinsistió en que la forma en la que se han llevado a cabo los ataques en varias ciudades ucranianas apuntan a una "fuerza profesional coordinada y altamente entrenada". "Y el único actor en la región capaz de hacerlo es la Federación Rusa", indicó.

Según Baer, "la gente, muy entrenada, que está llevando a cabo esas operaciones tiene armas rusas, uniformes militares sin marcas como hemos visto en Crimea. Está bastante claro de dónde viene todo esto".

El embajador dijo que todos los indicios apuntan a que estos sucesos "muy bien orquestados" tienen su origen en Moscú y aseguró que Rusia tiene todas las posibilidades de rebajar la tensión si lo desea.

Mientras tanto, la Casa Blanca ha reconocido este lunes que la CIA, John Brennan, ha estado en Kiev durante este fin de semana, aunque ha negado las acusaciones de que alentó operaciones tácticas ucranianas en el país. Respecto a un posible aumento de sanciones a Rusia, el Gobierno de estadounidense ha indicado que sigue coordinando con sus aliados europeos al respecto, y que las últimas "provocaciones" de Moscú "tendrán un coste" si ese país no da pasos para rebajar la tensión.

Los separatistas de Donetsk continuaron este lunes con su avance y toma de edificios oficiales en la región ucraniana de Donetsk, vecina de Rusia, tras hacer oídos sordos al ultimátum de Kiev que expiró a primera hora sin que los rebeldes depusieran las armas. Las milicias prometen hacerse con el control de toda la región.

El Gobierno ucraniano puso en marcha el domingo una operación antiterrorista, dirigida en primer lugar a recuperar el control de Slaviansk, tomada y rodeada por grupos paramilitares equipados y armados como soldados profesionales y que se dicen llamar Guardia Popular de Donetsk.