Cuando miles de familias valencianas tienen problemas para llegar a final de mes, llega el momento de priorizar los gastos en función de las necesidades.

A buen seguro, el pago de las multas de la Policía Local queda a la cola en este listado, tal y como se desprende de los últimos datos de la liquidación del presupuesto de 2013 del Ayuntamiento de Valencia.

Según el mencionado documento, los agentes pusieron el año pasado 25,7 millones de euros en multas por infracciones de tráfico, de los que el Ayuntamiento solo ha logrado recaudar el 31,1%, se decir, 8 millones de euros.

Esto significa que la morosidad en el pago de sanciones ha aumentado cinco puntos con respecto al año 2012, puesto que ese ejercicio la Policía Local puso boletines por valor de 29,4 millones de euros, de los que se recaudaron un 36% (10,6 millones).

Así, los valencianos pagaron en multas el año pasado 2,6 millones de euros menos que en 2012 y 1 millón de euros menos de lo presupuestado por el Consistorio. Además de la crisis, los recursos para alargar los procesos son las principales causas de esta tendencia.

En total, el Ayuntamiento de Valencia tiene desde el año 2001 un acumulado de 44,1 millones de euros pendientes de cobrar en concepto de multas de tráfico.

El Ayuntamiento recauda desde el año 1999 una media de 5,7 millones de euros, es decir un 28,8% de los 19,9 millones de euros que la Policía Local ha puesto en sanciones desde ese mismo año. Al respecto, el concejal del PSPV Pedro Sánchez ha pedido al PP que exija a la empresa que gestiona el cobro de las multas "una mayor eficacia".