El nuevo edificio del Centro de Química y Materiales de Aragón (CEQMA), que se levantará en la ciudad de Zaragoza, tendrá más de 14.000 metros cuadrados y capacidad para albergar a 425 investigadores y 103 laboratorios. Las instalaciones, presupuestadas en 18 millones de euros, estarán terminadas a finales de 2015.

Este espacio acogerá toda la actividad científica de los institutos mixtos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la Universidad de Zaragoza, es decir, el de Ciencias de los Materiales (ICMA) y el de Síntesis Química y Catálisis Homogénea (ISQCH).

Los dos institutos cuentan con unos 360 investigadores, trabajando en distintos edificios. Este proyecto ubicará las instalaciones de los citados centros en la Parcela C3 del Campus Río Ebro de la Universidad de Zaragoza.

Así lo han indicado, este jueves en una rueda de prensa en el Instituto Tecnológico Aragón (ITA) para la presentación del proyecto, los consejeros de Industria e Innovación y de Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga y José Luis Saz, respectivamente.

"Estos institutos tienen una capacidad de captación anual de fondos europeos de unos 12 ó 13 millones de euros para proyectos de investigación a nivela nacional e internacional. Incluso se están impulsando proyectos de extraordinaria importancia con patentes a través de empresas norteamericanas", ha señalado Aliaga.

Sobre la obra, tendrá un coste total de 18 millones de euros, cofinanciados al 50 por ciento por el Gobierno de Aragón y por Fondos Feder de la Unión Europea, durante los años 2014 y 2015.

El Departamento de Industria e Innovación es el que se hará cargo de los trabajos, con la encomienda del ITA, que ha redactado el proyecto, sobre la dirección de la gestión material y técnica de la construcción. A su licitación se han presentado las propuestas de 16 empresas.

De esta forma, el consejero de Industria e Innovación, Arturo Aliaga, ha puntualizado que, en las próximas semanas, se realizará la adjudicación de las obras que comenzarán, previsiblemente, el próximo mes de junio, con un plazo de ejecución de 18 meses.

Las instalaciones estarán terminadas a finales de 2015, pero todavía no se ha concretado la fecha para que los investigadores realicen el traslado.

"Este edificio supone un hito para la investigación científica en la Comunidad autónoma, y no únicamente por sus dimensiones o impacto económica, sino también porque permitirá mejorar sustancialmente las condiciones de trabajo científico, así como apoyar las actividades de investigación, desarrollo e innovación de nuestras empresas y la aparición de otras nuevas de base tecnológica", ha recalcado Aliaga.

Un proyecto "muy demandado"

Arturo Aliaga ha sostenido que este proyecto era "muy demandado" por los dos institutos, de los que ha destacado su proyección internacional.

Aunque ha reconocido que la iniciativa se ha ido "retrasando en el tiempo", debido a los problemas presupuestarios, finalmente, "tomamos la decisión de buscar un camino para conseguir la financiación".

El titular de Industria e Innovación ha incidido en que este edificio aportará las instalaciones necesarias a los institutos para que puedan competir, en mejores condiciones, con centros europeos.

De esta forma, se consigue "eliminar la dispersión" en la que se encuentra los investigadores que trabajan en el ICMA y en el ISQCH y solucionar la "falta de espacios".

Con estas instalaciones, ha agregado Aliaga, se cubren las necesidades "presentes y futuras" de los dos institutos de investigación.

Apuesta del gobierno

El consejero de Hacienda y Administración Pública, José Luis Saz, ha resaltado que la construcción de esta infraestructura es un "buen ejemplo" de la "firme" apuesta del Gobierno aragonés por la inversión en I+D+i para el año 2014, como motor de desarrollo económico en la región.

"Estamos convencidos de que para poder desarrollar un proyecto científico de calidad, necesitamos unas infraestructuras de calidad, y las vamos a tener para comienzos de 2016 como regalo de Reyes", ha añadido.

Saz ha explicado que el proyecto estaba planteado para que los fondos fueran aportados al 50 por ciento entre el Estado y Europa, pero las restricciones presupuestarias han hecho que la parte del gasto que correspondería al Gobierno central la tenga que asumir el autonómico.

En concreto, el Ejecutivo autonómico ha consignado 63 millones de euros en el presupuesto de 2014 para investigación, desarrollo y nuevas tecnologías, "lo que supone la mayor inversión en esta materia en los últimos diez años". El incremento es del 26,47 por ciento respecto al ejercicio de 2013, cuando se destinaron 49,8 millones.